Un sujeto conocido como “Karateca”, quien purga prisión domiciliaria por una causa de robo agravado, resultó ser el líder de una banda dedicada al narcotráfico en el sur tucumano y en otras provincias, con una particularidad: habría usado a su hija de 15 año para repartir la droga entre los muchos koscos que maneja en varias ciudades.
El entramado narco quedó al descubierto tras 16 allanamientos, uno de ellos en Ledesma, Jujuy, con los que la Digedrop de la Policía de Tucumán coronó una larga investigación, y que derivaron en el secuestro de una importante cantidad de estupefacientes, además de la detención de ocho sospechosos.
El lider de la gavilla tiene 37 años y otros tres hijos, cuyo cuidado le sirvió de excusa para que le otorguen el beneficio de purgar la detención en su domicilio, aunque después se comprobó que en realidad los menores no estaban a su cargo, ya que viven con su madre.
Lo que sorprendió a los efectivos locales y federales fue la extensión de la red de narcomenudeo, que incluso supera los límtes tucumanos, llegando hasta Termas de Río Hondo, en Santigo del Estero, y a Catamarca, lo que se descubrió cuando se detuvo a un taxista llevando a esa provincia 150 kilos de marihuana.
El tamaño de la estructura delictiva montada por el “Karateca” parece darle la razón al obispo de Concepción, José Antonio Díaz, cuando aseveró que “la droga ha avanzado mucho”, refiriéndose justamente al aumento exponencial del consumo de estupefacientes en todo el sur provincial.
fuente: contexto