De movidas políticas de cara al 2023 en la Ciudad del Limón y un Loco Monedita que quiere expandirse

—¡¡¡Eduard querido!!! ¿Por qué puso ese cartel en su silla que dice: no utilizar? ¿Acaso se me lo quiere cambiar de ubicación en el bar?
—No, amigo, le quiero significar algunas cosas que pasan en la política comarcana con el tema de que no hay re reelecciones.
—Es un tema interesante, pero falta bastante para el 2023.
—No se crea, en política los tiempos son relativos.
—¿Tiene algún ejemplo a mano para darme?
—Sipi.
—Bueno, largue y deje de dar más vueltas que perro pa´ echarse…
—¿Quiere que vayamos a la Ciudad del Limón?
—¡¡¡Vamos!!! ¿Qué pasa por esos lares?
—Noguera meterá mano en el gabinete con la mira en 2023.
—¿Quién se va?
—Se va el secretario de Gobierno y asumirá un concejal en su lugar.
—¿Qué concejal?
—Maxi Córdoba.
—¿Por qué asumirá él?
—Dicen que es el único en el que confía Noguera para que le devuelva la intendencia en 2027.
—¿No le contaron lo que le pasó a José cuando quiso hacer lo mismo?
—Parece que no.
—¿Y no podía poner un pariente o a la mujer?
—Dicen que ella no mide y por eso tuvo que echar mano a Maxi.
—¿Y con eso solucionaría todo?
—Le tiene que ganar al candidato de Roque Tobías
—¿Y quién sería?
—Dicen que Pascual Zamora o su mujer. Por lo pronto, Pascual ya está entregando remeras con su nombre y con el número 2023, no aclara si es para intendente o concejal.
—Esto se pone interesante.
—¿Quiere que sigamos hablando de Tafí Viejo?
—Como dice usted: sipi.
—Hay un loco de la capital que se quiere hacer fuerte en Lomas de Tafí.
—¿Alguien del Obarrio?
—¡¡¡No sea zopenco!!! Me refiero al Loco Monedita.
—Debería preocuparse por dejar a la mujer en la Intendencia.
—Ya le dije que ella no mide y que él quiere cambiar figuritas con el conscripto Ricardito.
—¿Y eso funcionará?
—En realidad, al conscripto Ricardito no le haría falta el Loco Monedita, porque ahora parece alguien al que le roban el televisor.
—¿Por qué?
—Porque se le va la imagen muy rápido. Le diría que está en caída libre en sus propios baches.
—¡Usted no sirve, Eduard! Pago el cafecito de una…
—Le agradezco, pero ya pedí un par de birras a su cuenta.
—¡¡¡Ya me jodió de nuevo…!!!

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