El presidente afirmó que su gestión “sinceró” la cuestión de la pobreza en el país, y consideró que el gobierno anterior “gastó todos los ahorros” públicos con el propósito de “generar una ficción”.
“Nos quedamos cortos con el diagnóstico inicial. El nivel de destrucción que encontramos en el Estado es muy grande, sobre todo en el sistema de transporte. Hicimos un sinceramiento con el tema de la pobreza porque el Gobierno anterior gastó ahorros en generar una ficción”, señaló Macri en una entrevista concedida al canal de televisión LN+, del diario La Nación.
En ese sentido, el mandatario comentó que “había mucha gente que era pobre y no lo sabía”, y que durante el kirchnerismo “se distribuía lo que no se producía”.
En un clima distendido, el jefe de Estado respondió a las preguntas formuladas por los presentadores Dolores Cahen D’anvers y Juan Miceli y al referirse a la cuestión de la crisis energética subrayó que las empresas “necesitarán tiempo para lograr que no haya más cortes” en el suministro.
“Vamos a aplicar un sistema gradual porque sabemos que no le podemos pedir más esfuerzos personales a los argentinos. Las empresas tardarán algunos años en lograr que se terminen los cortes. Este año habrá, pero menos porque estamos trabajando para reducirlos”, subrayó Macri.
Respecto de las investigaciones que pesan sobre ex funcionarios de los gobiernos de Cristina Kirchner y Néstor Kirchner, Macri remarcó que “se debe dejar que la Justicia avance”.
Además, negó que se favorezca al empresario Ángelo Calcaterra, primo del mandatario, en la adjudicación de contratos de obra pública.
“No intervengo para que las causas avancen o se detengan. Y no favorecemos a ningún empresario en la concesión de contratos de obra pública, que por cierto bajaron en su costo un 20 por ciento desde que asumimos. Vamos a garantizar que haya competencia y las licitaciones sean transparentes”, apuntó el jefe de Estado.
Macri reconoció que en los primeros meses de su administración “sintió mucho estrés”, y que los integrantes de su gabinete debieron hacer “un aprendizaje” en cuanto al manejo del Estado.
“Los primeros meses sufrí mucho estrés en función de la herencia que recibimos y del hecho de habituarme a las diferencias que existen entre administrar el Gobierno de la Ciudad y hacerlo con el Estado nacional. Todos los integrantes del gabinete hicieron este aprendizaje”, recalcó.
El mandatario aseguró, además, que su esposa y primera dama, Juliana Awada, “no esta siendo medida” en encuestas con la intención de que se presente como candidata en las próximas elecciones.
“No estamos midiendo a Juliana (Awada). Esa no es su función y ella está cómoda en su rol como primera dama. Está tranquila en eso. Mis hijos más grandes también, aunque me reclaman más tiempo y me piden que se respete su privacidad”, observó.
El presidente reconoció que aspira a un segundo mandato, pero enfatizó que “todo el tiempo piensa en el día después” y que “tiene mucho respeto por el poder”.
“Pienso todo el tiempo en el día después de cuando deje el Gobierno. Lo más probable es que estemos acá para un segundo mandato. Luego, me veo viviendo un tiempo fuera del país, como para tomar distancia. Y luego volver. Le tengo desde chico mucho respeto al poder, por eso hay que mantener el equilibrio y no alejarse de los afectos”, puntualizó.