El próximo domingo termina el año, pero los problemas inflacionarios de Argentina seguirán estando ahí en 2023. Tal es así, que en los primeros días de enero se activarán una serie de incrementos programados que pondrán en jaque el bolsillo principalmente de los trabajadores asalariados.
En lo que respecto a los trenes, el Gobierno oficializó que las líneas Sarmiento, San Martín, Mitre y el Tren de la Costa pasarán de costar $ 17,25 a $ 22 (27,5% de suba). Los pasajes más altos alcanzarán los $ 35 (34,6% de suba).
Serán más pronunciadas las subas de precios de las líneas Roca, Belgrano Norte, Belgrano Sur y Urquiza. El valor del boleto será unificado en $ 17, lo que implicará aumentos que van del 51% al 79%. En ese caso, el pasaje de mayor valor alcanzará los $ 27.
Cabe recordar, además, que aún está pendiente la audiencia pública en CABA para debatir el nuevo precio del subte. Fuentes oficiales adelantaron que se evalúa una propuesta de incremento en cuatro tramos, que llevaría el boleto a $ 58 en marzo, $ 67 en mayo, $ 74 en junio y $ 80 en septiembre.
Servicios de gas y agua
En servicios públicos hay aún varias etapas pendientes de quita de subsidios. En el caso del gas, los usuarios nivel 1 (mayores ingresos), tuvieron ya una quita del 20% en octubre y del 40% en noviembre, pero aún deberán enfrentar el 40% restante en enero de 2023. Esto llevará a que sus facturas alcancen un incremento total del 167% de punta a punta.
Es diferente la situación para los usuarios nivel 3, que mantendrán el subsidio y los de nivel 2, que mantendrán una parte de la tarifa subsidiada, pero deberán enfrentar una quita absoluta sobre el excedente de determinados umbrales de consumo (varían según categoría, mes del año y zona geográfica).
Los usuarios de las zonas consideradas de “ingresos altos” ya perdieron el 100% de los subsidios desde noviembre pasado.
Cabe aclarar, que tampoco se ha completado la quita de subsidios del servicio eléctrico, pero el 40% que queda pendiente para los usuarios altos se aplicará recién en el período febrero-marzo.
Combustibles
Uno de los aumentos más significativos que habrá en enero es el de los combustibles. Si bien no afectará a todos los argentinos de forma directa -solo a quienes andan en auto- sí tendrá un impacto en el bolsillo de toda la población de manera indirecta. Es que los ajustes en nafta y gasoil encarecen los servicios de transporte y distribución, lo que en el corto o mediano plazo se traslada al valor final de los bienes que se venden en todo el país. Dicho de otra forma, presionan el avance de la inflación.
En esta oportunidad, el ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, anunció que se acordaron cuatro incrementos de precios consecutivos con las petroleras. Uno ya se aplicó (fue del 4% en diciembre), pero todavía está pendiente una suba del 4% en enero, del 4% en febrero y del 3,8% en marzo.
Si el porcentaje anunciado es exacto, en el primer mes del 2023 el litro de nafta súper pasará a costar $ 156,94 en las estaciones de servicio de YPF en la Ciudad de Buenos Aires.
Telefonía
Aunque hay discrepancias entre las empresas y el Gobierno -por las regulaciones de precios- las compañías de telefonía están anunciando aumentos que rozan el 25% para enero de 2023.
Hasta acá, el único caso concreto en realidad es el de Movistar, que avisó a sus clientes que aplicará un incremento en sus tarifas del 23,5% a partir de enero. Sin embargo, se espera que las demás empresas sigan los mismos pasos en los próximos días.
Alquileres
De acuerdo a lo que establece la ley de alquileres, aquellos inquilinos que comenzaron a alquilar en enero de 2022, el mes que viene deberán enfrentar un aumento de la renta del 80,81%. Eso significa que, si el valor de alquiler mensual era de $ 50.000, a partir de enero tendrán que abonar $ 90.405 mensuales hasta diciembre de 2023.
Es necesario recordar que para establecer el porcentaje de incremento se debe aplicar una fórmula preestablecida por el marco legal vigente. Primero, se debe consultar cuál era el valor del Índice para contratos de Locación (ICL) al momento de firmarse el contrato y en cuánto se encuentra al momento de la actualización (en este caso en enero). Esa información se publica diariamente en la web del Banco Central.
Posteriormente, se debe dividir el ICL actual con el ICL de un año atrás. Al resultado de esa cuenta (hoy daría de 1,80813) se lo debe multiplicar por el monto de alquiler anterior. Así se obtiene el nuevo valor de renta a pagar.
Servicio doméstico
Aquellas personas que tengan personal doméstico registrado deberán considerar un aumento salarial del 7% en enero, en relación a los sueldos que están vigentes desde noviembre.
De esta forma, el personal para tareas generales sin retiro pasará a ganar $ 611,50 la hora o $ 77.423,50 mensuales.
En el otro extremo de la escala, los supervisores sin retiro tendrán desde enero un salario de $ 749,5 por hora o $ 95.142 mensuales.
fuente: infobae