Destino. Esa puede ser una buena explicación para lo que le sucedió a Matheus Salori, el hijo el entrenador de Chapecoense, Caio Júnior. El joven iba a viajar a Medellín con la delegación del equipo brasileño en el avión que se accidentó en el noroeste de Colombia, pero no pudo abordar porque se había olvidado el pasaporte.
“Amigos, yo, mi hermano y mi madre estamos bien. Necesitamos fuerza, pero les pedimos que nos den un poco de privacidad, especialmente a mi madres. Gracias a todos por haber llamado y por enviar mensajes. Yo estaba en San Pablo, pero no pude abordar porque había olvidado mi pasaporte. Somos fuertes, vamos a pasar por esto. Gracias a todos”, escribió Matheus en su cuenta de Facebook, en un mensaje compartido sólo para sus amigos, pero que no tardó en viralizarse.
Caio Júnior, su padre, murió en el trágico accidente junto a otras 74 personas, según datos oficiales de las autoridades. Por esas cosas del destino, también, después de haber vencido a San Lorenzo en la semifinal de la Copa Sudamericana, el DT había declarado: “Si muriera hoy, moriría feliz”. El dolor para la familia es inmenso.
Fuente: Canchallena