Con expectativas de una buena producción, este martes inicia la zafra 2023 en la provincia de Tucumán. Será en el ingenio La Florida.
Sebastián Budeguer, vicepresidente del Instituto de Promoción del Azúcar y Alcohol de Tucumán (IPAAT), contó las sensaciones. “Desde el punto de vista de cantidad producida, esperamos una zafra parecida a la del año pasado, si bien los cañaverales se vieron afectados por la sequía del verano, las lluvias actuales están ayudando a que se recuperen un poco. En definitiva esperamos una zafra parecida en cantidad. El año pasado fueron unos 14 millones de toneladas de caña y para este año esperamos una cantidad parecida por debajo de los normales 16 millones de toneladas. Será una zafra un poco más ajustada, pero con suficiente cantidad para abastecer normalmente el mercado interno, tanto en azúcar como en alcohol”.
Además, agregó: “No nos olvidemos que el azúcar es un producto de primera necesidad, la demanda tanto en el mercado interno como externo viene fuerte, sostenida, hay muy buena demanda de azúcar, lo mismo sucede con el alcohol, al crecer la demanda de nafta, crece por lo consiguiente la demanda de biocombustible, así que tenemos muy buena demanda en ambos casos, lo cual sostiene buenos niveles de precios”.
Por otro lado, reconoció que absolutamente todos los ingenios van a abrir sus puertas, van a producir azúcar y alcohol. Los cañeros también están preparado en una mejor condición de arranque con respecto a zafras anteriores beneficiados por como marchó el mercado azucarero durante el verano. Además, expresó que “hay 15 ingenios en Tucumán y que no todos producen alcohol, si la inmensa mayoría pero hay un par de ingenios que decidieron no producir alcohol y solamente hacen azúcar como por ejemplo el Providencia”.
Con respecto la mano de obra que se genera, Budeguer explicó: “Tenes que pensar que hay en promedio 500 personas con un empleo directo por ingenio, más todos los empleados indirectos, proveedores, contratistas, servicios relacionados, más todo lo que implica el movimiento en campo, la cosecha, el transporte en las fincas cañeras”.
“Nos preocupa lo que está pasando en la economía en general y estamos atentos a cualquier cimbronazo, es difícil decir que no vamos a sufrir. El contexto general es positivo, por demanda interna y por demanda global pero estamos sujetos a lo que pase en el país, una devaluación puede ser un golpe duro para la actividad, la inflación, las tasas de interés, el precio del alcohol que viene atrasado y desalienta a su producción, es un potencial riesgo”.
fuente: lv12