Se niega a dejar su cargo y sigue cobrando casi 4 millones de pesos por mes. La magistrada cumplió los 75 años el mes pasado pero no dejó el cargo como marca la Constitución Nacional, a la espera de un aval que nunca llegó del Senado.
La Cámara Federal de Casación Penal mantendrá hoy una reunión plenaria de todo sus integrantes para tratar la situación de la jueza Ana María Figueroa, quien el 9 de agosto cumplió 75 años, la edad máxima que establece la Constitución Nacional para permanecer en el cargo.
No cumple funciones, pero cobra
La magistrada no renunció, pero tampoco cumple funciones. Está esperando que el Senado se expida sobre su futuro y la autorice a continuar cinco años más en la Justicia.
Fuentes judiciales informaron que la reunión se realizará a las 10:30 en el primer piso de los tribunales de Comodoro Py, donde tiene su sede la Cámara de Casación. El encuentro será encabezado por Mariano Borinsky, quien reemplazó a Figueroa en la presidencia del tribunal. En el encuentro se esperan definiciones sobre la situación de Figueroa.
La jueza cumplió el 9 de agosto 75 años. Se trata de la la edad máxima que establece la Constitución Nacional para que una persona sea juez con la única excepción que el Senado apruebe su continuidad por cinco años años. Esa continuidad se comenzó a tramitar porque el gobierno de Alberto Fernández envió el pliego de Figueroa al Senado y se hizo la audiencia en la Comisión de Acuerdos con dictamen favorable. Pero el tema nunca se trató en el pleno de la cámara alta.
El oficialismo no consiguió los votos para abrir la sesión ya que la oposición de Juntos por el Cambio rechaza la continuidad de Figueroa por su cercanía con el kirchnerismo. Al llegar a los 75 años, Figueroa decidió dejar la presidencia de Casación y anticipó que no iba a firmar más fallos ni resoluciones a la espera que se defina su situación en el Senado.
Así se lo hizo saber a Horacio Rosatti, presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y del Consejo de la Magistratura de la Nación, en una nota que le mandó el mismo 9 de agosto. Le explicó su situación y señaló que esperaba “la culminación del trámite” en el Senado.