El protocolo forma parte de “Mesas más justas”, un proyecto impulsado por el grupo de estudiantes ALDE. Desde principios de noviembre se lleva a cabo una prueba piloto. La opinión de los profesores. ¿Cuándo sean médicos o doctores, si no les gusta algo, podrán suspender una operación o dejar de atender al paciente?
En el marco del proyecto “Mesas más justas”, impulsado por la Agrupación de Lucha por los Derechos de los Estudiantes (ALDE), que conduce el centro de estudiantes de la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), las autoridades de la mencionada casa de estudios aprobaron un novedoso protocolo que permite a los alumnos solicitar la suspensión de un examen si se llegaran a sentir “maltratados” por un docente. Esta iniciativa rige desde principios de noviembre, pero es importante destacar que se encuentra en una fase de “prueba piloto”.
“A partir de las mesas de noviembre, si en una mesa sufrís malos tratos o te toman algo que no es del área, vas a poder pedir que se interrumpa el examen y que te vuelva a tomar otro tribunal examinador, en ese mismo llamado”, precisaron desde ALDE el pasado 28 de septiembre, día en el que la UNR, mediante un comunicado firmado por el profesor y doctor Jorge Molinas, decano y presidente del Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Médicas de la universidad rosarina, confirmó la aprobación del protocolo.
Esta “herramienta”, tal como la calificaron desde ALDE, fue presentada frente a los antecedentes de algunos exámenes “desiguales e injustos” que debieron rendir los estudiantes, tiene como objetivo “mejorar las formas de evaluación”.
“También va a dejar un registro de quienes son los docentes que realizan estás prácticas que nos perjudican”, subrayaron desde ALDE en una publicación de Instagram.
Ante este escenario, el alumno puede solicitar la interrupción del examen cuando hay una “evaluación de contenidos no incluidos en el programa del área”. En segundo lugar, ante la consideración de los docentes a cargo de la mesa de juzgar “incorrectos” conceptos “debidamente respaldados por la bibliografía”, según marca el protocolo. En tercer y último lugar, si hubiera “falta de respeto o trato inadecuado para un examen”.
Si un alumno de Medicina precisara solicitar la interrupción de un examen, primero debe comunicárselo al docente de turno. Acto seguido, el interesado tiene que buscar el formulario que está disponible en la Secretaría de cada año y completarlo con los datos requeridos. Una vez finalizada esa etapa, las autoridades universitarias deberán asignar un nuevo Tribunal Examinador para el solicitante, que deberá volver a rendir dentro del mismo turno del examen.
De presentarse una situación de maltrato durante un examen virtual, el procedimiento es similar, solo que en este caso el formulario correspondiente debe enviarse vía correo electrónico a la Secretaría del área correspondiente.
Tras analizar el proyecto presentado por los estudiantes nucleados en ALDE, las autoridades universitarias resolvieron “autorizar a la Dirección de la Escuela de Medicina a implementar una prueba del proyecto presentado, en modalidad piloto, que permita al estudiante solicitar la interrupción del examen”, tal como indica el comunicado difundido a fines de septiembre.
Asimismo, el Consejo Directivo de Ciencias Médicas aclaró que el protocolo estará vigente durante las mesas de examen Noviembre – Diciembre y Febrero – Marzo del presente ciclo lectivo. “Terminadas las mismas se evaluarán los resultados y se debatirá sobre su continuidad”, concluyeron.
La medida, como era de esperarse, “no cayó bien” y generó cierto clima de malestar entre los profesores. “Los alumnos relataron que habían experimentado situaciones de maltrato en los exámenes y que se les preguntan cosas que no corresponden al área, pero entre los profesores la medida no cayó bien, muchos se sintieron observados, sobre todo porque también los profesores suelen recibir agresiones verbales de los alumnos”, resumió una docente de la facultad, en diálogo con el diario La Capital.
En contra del protocolo impulsado desde ALDE, los estudiantes nucleados en el grupo Impulso difundieron un comunicado el pasado 6 de noviembre, pocos días antes de que la normativa entrara en vigencia, en el que solicitaron una reunión extraordinaria y presentaron una moción “de reconsideración” para evaluar la posible anulación de la iniciativa.
Pero hasta este sábado, el protocolo de interrupción de un examen ante una situación de maltrato docente continuaba vigente.
fuente. infobae