En medio del debate por el precio del boleto de colectivo, la quita progresiva de los subsidios y la situación financiera crítica de algunas empresas, la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta) difundió un listado con los precios mínimos de los pasajes de micro en las 58 principales ciudades del país.
La localidad argentina que lidera el ranking y tiene la tarifa de transporte urbano más cara del país es Pergamino con un boleto a $500. Le sigue, bastante más lejos, Bahía Blanca ($345), Junín y Merlo ($300) y el quinto lugar lo tiene la ciudad balnearia de Mar del Plata con una tarifa que escala a $297,30.
En Tucumán, la comisión de Transporte del Concejo Deliberante de San Miguel de Tucumán estableció en diciembre pasado un incremento en la tarifa del ómnibus, de $120 a $230. De este modo, la provincia ocupa el puesto 24 en el ranking.
En el detalle, se pueden observar grandes brechas en los valores que pagan los pasajeros. Una vez más, los usuarios de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) son los que menos abonan por viaje en el país ($52 de tarifa mínima, hasta el lunes próximo, que pasarán a costar $77), seguidos por los de Santiago del Estero ($70) y Ushuaia ($85).
Otras tres ciudades tienen precios inferiores a los 100 pesos. Se trata de Resistencia ($85), Río Grande ($85,03) y Catamarca ($90). El resto de las jurisdicciones tienen valores mínimos del boleto de colectivo que oscilan entre los $100 y los $500.
La polémica por los precios
El ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, anunció durante la primera semana de Gobierno que habría una modificación del esquema de subsidios que afecta a los pasajes de colectivos y trenes de todo el país. A partir de ese momento, comenzó el debate acerca de cuánto pasaría a costar el boleto mínimo si la asistencia financiera del Estado bajara a “cero”.
Según la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (Aaeta), la respuesta a esa pregunta es $797, un valor que implica una diferencia de $744,04 con respecto al boleto mínimo que se paga hoy en el AMBA ($52,96).
Está claro, por supuesto, que el Gobierno nacional no avanzará con la quita de subsidios de un día para otro, por lo que desde Aaeta exigen una mejor administración de los recursos mientras se termina con el proceso de quita progresiva. De acuerdo a los datos suministrados por el organismo, el sistema de transporte del AMBA requiere hoy de $187.978 millones mensuales de parte del Estado para funcionar correctamente. Sin embargo, aseguran, el Gobierno sólo reconoce $97.784 millones, por lo que queda un déficit de $90.193 millones al mes.
Para los empresarios hay dos soluciones, o se aumenta el boleto a los mencionados $797 o se mejora el sistema de subsidios. “De cualquier otra manera seguiremos yendo a pérdida. Hay muchas empresas al borde de la quiebra y ya nadie está pudiendo reponer las unidades”, lamentó Fusaro.
Para reflejar la situación crítica del sistema de transporte, desde Aaeta hicieron un repaso del desarrollo de la infraestructura en los últimos diez años. “Se sumaron 1,6 millones de habitantes en el AMBA entre 2010 y 2022. La oferta de colectivos es la misma (18.500 unidades) con una baja además en la cantidad de kilómetros producidos ( de 110 mil a 100 mill promedio por mes). Eso explica la percepción de deterioro de servicio, sumado a la mayor antigüedad de flota”, explicaron.
“Todo es consecuencia -concluyeron- de la pésima política tarifaria de estos años. Cabe recordar que está prohibido incrementar la flota, porque el Estado se ha negado a sumar más dinero en subsidios ( o tarifa). Ese es el desafío que se debe resolver en el AMBA, uno de los 20 centros urbanos más grandes del planeta”.
fuente: contexto