En la escuela Secundaria Los Aguirre, y con motivo de la conmemoración del Día del Escritor (13 de Junio), se llevó a cabo ayer un encuentro literario con la presencia de los escritores tucumanos, Fabián Seidán y Abel Sayagués. En la oportunidad, Seidán deleitó a los alumnos del establecimiento con los relatos de su libro: “Tucumán Fantástico: Y las rutas del misterio”, que reúne 19 leyendas urbanas y rurales de nuestra provincia.
El encuentro fue organizado por las profesoras de Lengua y Literatura, María José Arnau y Silvana Bourlé, y el director de dicho establecimiento educativo, Pablo Martín Seidán.
Un libro bien tucumano
Fabián Seidán contó que “Tucumán Fantástico”, reúne relatos cortos de hechos sobrenaturales que ocurrieron a lo largo de la provincia, en sus distintos pueblos. Hay cuentos de Yerba Buena, de Simoca, Trancas, Burruyacú, Tafí del Valle, Concepción, de Lules, Famaillá, Monteros, San Pedro de Colalao, Acheral, Escaba, Taruca Pampa, San Pablo, Villa Hileret y de San Miguel de Tucumán.
De la tradición oral a la escrita
El escritor comentó que muchas son historias que fueron pasadas de la tradición oral a la escrita. “La gente comenta hechos mágicos, de miedo, sin sentido; pero creen que ocurrieron de verdad, lo asumen como reales, porque alguien, algún conocido o de su confianza, les dijo que sucedió y nadie puede refutar ni probar nada”, comentó.
Recordó que el caso más emblemático de Tucumán es el del Perro Familiar, un ser mitológico, muy temido por los obreros del surco. “Todos decían que era verdad, que de noche salía y se comía algún obrero. También, que el dueño del ingenio azucarero había hecho un trato con el diablo para tener una zafra exitosa y hacer mucho dinero; entonces le ofrecía a cambio vidas humanas. La de sus peones”, acotó.
Otros seres fantásticos que mencionó fueron los duendes. “Mucha gente cree en duendes, seres que andan libres por el monte y en la montaña o escondidos en alguna casa. Algunos los describen como hombrecitos muy pequeños, otros dicen que llevan un sombrero grande y que hacen travesuras; otros cuentan que tienen una mano de algodón y otra de hierro y que a sus víctimas les pregunta con cuál mano quieren que le pegue…”.
Los extraterrestre y seres mitológicos
También dijo que están los extraterrestres. “Mucha gente dice que vio platos voladores y hay historias de encuentros cercanos que fueron publicados en los diarios como el de Trancas, que ocurrió en los años 60 del siglo pasado. Hay programas de televisión que aseguran que existen”.
También están los seres mitológicos, historias de los pueblos originarios de los tiempos de la conquista, relatos de aparecidos, de fantasmas en la ruta y otros que habitan en casas antiguas.
Seidán explicó que para hacer un cuento de miedo sólo hace falta imaginación o alguna vieja histórica oída por ahí. Relatos que no tiene explicación, cosas a las que le tenemos miedo (arañas, víboras, reptiles, un bosque, un paraje solitario, una casa vieja) sirven para hacer un cuento de miedo o una leyenda.
Y aclaró: “El final enigmático en el cuento es muy importante, pues aporta un desenlace sorprendente. El final en el cuento siempre está cargado de tensión. Un buen final en un cuento es fundamental”, subrayó.
En la Escuela Secundaria de Los Aguirre, los alumnos van a comenzar a trabajar con el libro de leyendas de Fabián Seidán.
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