Los dos religiosos están detenidos señalados por las violaciones de menores hipoacúsicos en el Instituto Próvolo de Mendoza.
La investigación por los casos de abusos y violaciones a menores en el Instituto Próvolo de Luján de Cuyo (Gran Mendoza) sumó nuevas pruebas que comprometen aún más a tres de los cinco imputados que tiene la causa.Ayer, en una audiencia realizada para determinar si los detenidos siguen en la cárcel o esperan el juicio en libertad, se ventiló que los curas Nicola Corradi (82) y Horacio Corbacho (50) y el empleado José Luis Ojeda (41) tenían en su poder gran cantidad de videos y fotos de pornografía infantil.
Según publica el diario El Sol, los agentes también descubrieron tres negativos fotográficos en la habitación de Corradi. Mientras que en poder de Ojeda, un empleado administrativo del instituto religioso que, como los chicos abusados, es hipoacúsico, detectaron un rollo fotográfico y tres negativos con material de alto contenido sexual que involucraría a menores.
Los investigadores ahora deberán comprobar si esas imágenes corresponden a víctimas de la causa o se descargaron de sitios de Internet.
Esas pruebas alcanzaron para que los abogados que representan a las familias de las víctimas solicitaran a la jueza de Garantías, Alejandra Alonso, que los detenidos continuaran en el penal de Boulogne Sur Mer hasta el juicio. La audiencia continuará mañana.
Las denuncias por casos de abusos sexuales a cerca de veinte menores en el Próvolo se conocieron a fines del año pasado. La causa tiene cinco imputados: el italiano Corradi, el único que tiene el beneficio de la prisión domiciliaria por su avanzada edad y delicado estado de salud; Corbacho, Ojeda y otros dos empleados del instituto: Jorge Bordón (50) y Armando Gómez (46).
Fuente: Clarín