Un nuevo ceremonial de extrordinario nivel, ordenado por el Rey Felipe VI, fue estrenado esta mañana en España por el presidente argentino Mauricio Macri “como muestra de especial cariño y respeto de la Casa Real”.
El propósito es también destacar la enorme importancia histórica y estética del Palacio Real, el mayor de Europa occidental y uno de los principales del mundo que alberga piezas artísticas de incalculable valor.
Se trató de dotar a esta nueva ceremonia “de una mayor solemnidad, dignidad y brillantez”, La decisión personal del monarca busca reforzar al Palacio Real con los más importantes actos de Estado, “y hacer participar a todos los españoles de esta grandeza”.
Hasta ahora, el acto se realizaba en el Palacio de El Pardo, residencia de los jefes de estado en visita y desde ayer residencia de Macri que cuenta con una guardia montada de honor permanente en las puertas.
Madrid amaneció con banderas argentinas y españolas en varios espacios públicos
La mole imponente del Palacio Real presentó una de sus más bellas perspectivas, el Patio y Plaza de la Armería para un gran despliegue ceremonial.
Escoltados primero por motos y luego por caballos, el presidente Macri y su esposa Juliana Awada llegaron al Palacio Real en un viejo Roll Royce. Fue a las 10:30 en punto (las 6:30 en la Argentina) por la puerta de la Catedral. Los recibieron Felipe VI y Letizia con un apreton de manos.
Luego sonaron los himnos y 21 salvas.
Participaron bandera y escolta, escuadra de gastadores, un batallón con tres compañías de honores, escuadra de escolta real con batidores, banda de clarines y timbales, coraceros y lanceros, gran banda de música, sección de motos y cuatro piezas históricas de artillería.
Hace 600 días que España no recibe a ningún jefe de estado en una visita oficial por lo que se trabaja a destajo para que todo brille y nada falle ordenando las 3.418 habitaciones en una superficie de 135.000 metros cuadrados el doble del Palacio de Buckingam o el Palacio de Versalles.
El interior del edificio es deslumbrante e interminable. Alberga un gran patrimonio histórico artístico destacando el conjunto de los violines “Stradivarius Palatinos” que cada tanto deslumbran por su bellísimo sonido en presentaciones que los mantienen vivos pese a su solera.
En el lujoso mobiliario, con relojes de inmenso valor, jarrones y cerámicas de distintos orígenes, se despliegan colecciones de pintura, escultura y los célebres tapices reales que cuentan con una fábrica y talleres de mantenimiento.
En el banquete de gala, el presidente Macri y su esposa Juliana Awada ascenderán por la escalera principal de mármol custodiada en toda su extensión por los tradicionales alabarderos (hombres y mujeres) en sus antiguos trajes de gala. Es la unidad de protección con mayor proximidad al monarca. Después encontrarán a los Reyes y a los invitados en un deslumbrante ambiente iluminado por gigantescos candelabros de cristal.
Fuente: Clarín