Después de declarar ayer en su hotel ante la fiscal Susana Alonso, el Indio Solari se fue este mediodía de la ciudad de Olavarría.
El músico abandonó la ciudad en una avioneta privada, el mismo medio de transporte que había elegido para llegar antes del recital que el sábado terminó con dos muertos.
Después del trágico show, el músico estuvo recluido en el hotel Santa Rosa, ubicado en el centro de la ciudad, donde declaró ayer frente a la fiscal. Allí se alojó con su banda, Los Fundamentalistas del Aire Acondicionado, y los integrantes de En Vivo, la productora que organizó el show.
Justamente a la productora apuntó el Indio en su declaración de ayer, que dio como testigo de la tragedia en Olavarría, en la que murieron dos personas que asistieron a su show. El trámite se realizó con estricta reserva, pero hoy trascendieron algunos detalles de lo que le dijo Solari a la fiscal.
El músico contó que tuvo que detener veces el espectáculo porque que veía que había peleas muy ásperas. Pero deslindó todas las responsabilidades en En Vivo, la productora de los hermanos Matías y Marcos Peuscovich, que antes se llamaba Chacal Producciones y con quienes Solari viene trabajando desde hace casi una década.
Con ellos organizó 14 conciertos en nueve años, en Salta, San Luis, Mendoza y Entre Ríos, y también en la provincia de Buenos Aires. Como Chacal, la productora organizó otro recital trágico: el de La Renga en La Plata, donde el 30 de abril de 2011 murió un joven alcanzado por una bengala.
Durante toda la tarde y noche de ayer, fans y curiosos se apostaron en el hotel donde está alojado el Indio, esperando verlo, lo que no ocurrió.
Según trascendió, la fiscal Alonso podría tomarle declaración nuevamente a Solari. También podría citar al intendente, Ezequiel Galli, con quien hoy estuvo reunida pero, según fuentes municipales, “fue un encuentro informal y no tuvo carácter de declaración”.
Ante la funcionaria judicial, Solari insistió en que él no tiene responsabilidad sobre lo que ocurrió porque la productora estuvo a cargo de la organización y también describió lo que vio desde el escenario. “Son siete tipos que están rompiendo las pelotas. Alguien tiene que ir a sacar a estos boludos”, dijo el artista a los pocos minutos de comenzado el espectáculo sobre un grupo de personas que, visiblemente alcoholizados, se encontraban apretados contra las vallas de seguridad, con serio riesgo de ser lastimados.
Fuente: Clarín