La mayoría de las víctimas son menores de 35 años. Un 30% de las muertes ocurrieron en la Provincia.
En la Argentina, miles de personas mueren todos los años en accidentes de tránsito y parece que la gente aún no tomó conciencia al respecto: se sigue manejando mal y no se cumplen reglas básicas (ver El uso del cinturón…). Ayer, el Ministerio de Transporte de la Nación alertó sobre este flagelo al difundir un nuevo mapa oficial de la seguridad vial. El estudio reveló que el año pasado murieron 15 personas por día en todo el país y que cerca del 55%de las víctimas tenía menos de 35 años.
Según este nuevo relevamiento, durante 2016 hubo 5.613 muertes en todo el territorio nacional. El 30% ocurrió en la provincia de Buenos Aires, donde unas 1.559 personas perdieron la vida en rutas y calles. En cambio, la Ciudad mostró números mucho más bajos: 97 durante ese mismo período.
“No hay ninguna duda de que una de las razones de esta catástrofe que son más de 5.600 muertos es el estado de nuestras rutas”, aseguró a Clarín el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Según el funcionario, “el primer elemento de inseguridad vial en la Argentina es la mala infraestructura que se ha escondido en el pretexto de la falta de educación o concientización. Hay que mejorar enormemente y a largo plazo, pero eso sólo no sirve”.
Para hacer este estudio, la Agencia Nacional de Seguridad Vial implementó una nueva metodología que consiste en recolectar información por medio de una base de datos digital, donde los municipios van ingresan sus propias estadísticas. Este formato ya está funcionando en siete provincias.
“El Observatorio Vial es el corazón de la agencia. Entender mejor los comportamientos y costumbres viales de los argentinos nos permite partir de un diagnóstico adecuado sobre el cual trabajar en soluciones creadas para cada problemática local”, explicó Carlos Perez, director del área.
Al analizar la tasa de mortalidad (la relación entre el número de muertos y la población), se descubre que Santiago del Estero ostenta el promedio más elevado: 35,8 víctimas fatales cada 100.000 habitantes. Le siguen San Luis (24,9) y Catamarca (23). Luego, en la otra punta, están la provincia de Buenos Aires (9,3), Tierra del Fuego (5,1) y la Capital Federal (3,2).
“Los números son bastante lógicos. Esto tiene que ver con la infraestructura de la Provincia y la Capital, en mejor estado que las del norte del país”, dijo Fabián Pons, presidente de Ovilam, un organización especializada en seguridad vial.
Pons también señaló que los datos publicados por Transporte sólo toman en cuenta las muertes ocurridas en el momento del hecho porque la estadística está basada en los datos aportados por las policías provinciales. “Si se toman en cuenta los decesos en los hospitales luego del accidente, el número es mayor y da un promedio de 19 muertes por día. Es decir, más de 7.000 al año, lo que es el número real”, afirmó el experto, quien, a pesar de esto, elogió el nuevo método de medición implementado por el Gobierno porque “muestra un sinceramiento necesario”.
No obstante, el estudio no especifica las causas de los siniestros, como exceso de velocidad o el consumo de alcohol y drogas. “Algo muy importante para tomar medidas de prevención”, concluyó Pons.
El uso del cinturón, muy bajo
El relevamiento oficial reveló también que la mayoría de las familias no usa cinturón de seguridad. Sólo el 43,6% de los vehículos observados circula con todos sus ocupantes enganchados. Entre los conductores, el porcentaje de uso es del 50,2%, en copilotos es del 42,9% y en ocupantes traseros desciende a 23,1%.A nivel nacional el uso de cinturón se encuentra significativamente por debajo de la que exhiben la mayor parte de los países de la región.
Por otro lado, 8 de cada 10 conductores de vehículos son hombres. Las mujeres manejan menos pero se cuidan más: cerca del 60% utiliza el cinturón, contra menos del 50% de los hombres. Además, ellas influyen positivamente: cuando manejan, más del 50% de los ocupantes del vehículo lo llevan puesto.
Sobre la seguridad infantil, 7 de cada 10 menores de edad circulan desprotegidos, porque no utilizan ningún elemento de seguridad o porque utilizan uno incorrecto. Las regiones de NEA y NOA son las que presentan los niveles de desprotección más críticos.