La ministra Carolina Stanley confirmó que la semana que viene se restituirá ese beneficio, pero se analizará caso por caso para determinar quiénes no deben recibirla.
La ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, anunció hoy la decisión del gobierno de Mauricio Macri de dar marcha atrás con la baja de decenas de miles de pensiones a personas con discapacidad, pero aclaró que habrá una revisión caso por caso para determinar quiénes no deberían recibir ese beneficio.
La reacción de la Casa Rosada ocurrió tres días después de que surgieran las primeras denuncias de “errores” en la quita de esos subsidios. Y de las críticas de todo el arco opositor, desde el kirchnerismo, el massismo y la izquierda, como del sindicalismo y de diversos sectores sociales. Sin embargo, el impacto mayor en el seno del oficialismo fue la voz de la Iglesia, que se sumó a los cuestionamientos.
Fuentes gubernamentales aclararon que la restitución de las pensiones se hará de manera automática a partir de la semana que viene, aunque del listado de 70 mil beneficios dados de baja no alcanzará a las personas fallecidas, como a aquellos con altos ingresos comprobados.
También, se difundió la novedad en medio de una protesta en el Obelisco porteño, que convocó a cientos de manifestantes y que, desde el oficialismo, pudieron ver alguna “motorización” desde el ámbito político. Incluso, en estricta reserva, señalaban al municipio de La Matanza -que gobierna la kirchnerista Verónica Magario- como uno de los lugares desde donde llegaron muchos de los manifestantes.
En un comunicado, la funcionaria -que hoy mantuvo una reunión con el jefe de Gabinete, Marcos Peña- reiteró hoy que el Gobierno “va a asegurar el pago de las pensiones a todas las personas que sufren una discapacidad” y advirtió que ha existido una “utilización política de este tema por parte de mafias que lucran con el clientelismo”.
Fuente: Clarín