El humorista gráfico Juan Carlos Colombres, popularmente conocido como Landrú, murió este jueves 6, a los 94 años.
La triste noticia fue confirmada a través de las redes sociales de la fundación que lleva su nombre: “El humor está de luto. Juan Carlos Colombres, Landrú, falleció a los 94 años. Gracias x ofrecernos tantos años de buen humor. #LandrúGenio”, dice el mensaje posteado en Twitter.
Su nieto, Gonzalo Colombres, también utilizó las redes sociales para despedir a su abuelo: “Gracias por enseñarme que el humor es una de las cosas más importantes de la vida”, escribió.
“Lo despedimos con honor y con humor, fiel a la filosofía de vida que ejerció y transmitió”, se lee en el comunicado subido a la página de la Fundación Landrú. Y agrega: “Pasó sus últimos años en su casa de Recoleta, rodeado por su familia y siempre al tanto de los logros y proyectos de la Fundación. En los últimos meses salía poco, pero recibía visitas de familiares y amigos. Seguía de cerca las noticias nacionales e internacionales, como siempre hizo a lo largo de su carrera, y continuaba riéndose de la realidad”.
Además, lo definen como “un gran y buen hombre, el creador de una gran obra de humor”. Seguramente su obra será la mejor forma de tenerlo presente: “Sus textos, viñetas y personajes nos ayudarán a recordarlo todos los días y a seguir riendo. Como él querría, que el humor siga en nuestras vidas. Por ello, a pesar de la tristeza, seguiremos trabajando en Fundación”.
Nacido en Buenos Aires el 19 de enero de 1923, Colombres se dedicó desde muy joven al humor gráfico, a través del cual supo reflejar una mirada política y social de la Argentina, fina y sagaz.
Entre sus personajes más emblemáticos están Tía Vicenta, Rogelio, Gato Clase A, Jacinto W, Cuculiu, Sir. Jonás, Señor Cateura, Señor Porcel y Duddy Gorgola.
El “dibujante”, como le gustaba que lo llamaran, a los siete años ya había creado su propia revista de historietas, que repartía entre sus compañeros. Luego de un paso fugaz por la carrera de arquitectura, en 1945 publicó su primer dibujo en la revista Don Fulgencio.
De ahí en más, continuó trabajando en Cascabel, Rico Tipo, Vea y Lea, El Hogary en 1947 comenzó a firmar con el seudónimo de Landrú.
Fue libretista de Tato Bores, en 1957 fundó Tía Vicenta y en 1968 realizó la revista Tío Landrú. Desde los ’70 trabajó en los diarios La Nación y Clarín.
Uno de los grandes golpes en su vida fue cuando, en 1994, en medio de un asalto recibió un tiro en la mano que lo mantuvo durante muchos meses alejado del dibujo.
En el 2003 fue nombrado Ciudadano Ilustre de la Ciudad de Buenos Aires. Su primer libro, Landrú, el que no se ríe es un mal educado, se publicó en el 2014.
Trabajó también en Primera Plana, Gente, Somos, Para Tí, La Nación Revista, El Gráfico, Somos, Satiricón, El Mundo, Ámbito Financiero y La Nueva Provincia.