El abogado Gustavo Rivas, acusado por “corrupción y promoción de la prostitución de menores” en Gualeguaychú, se negó a declarar ante el fiscal. Sí habló con la prensa.
El abogado Gustavo Rivas, acusado por “corrupción y promoción de la prostitución de menores” en Gualeguaychú, se abstuvo de declarar hoy ante el fiscal Lisandro Beherán en los tribunales de esa ciudad entrerriana y según adelantó su defensa repetirá esa actitud hasta tanto se revele la identidad de los denunciantes.
La citación siguió a las denuncias de dos nuevas víctimas que se presentaron ante la Justicia y elevaron a seis las acusaciones contra Rivas, como parte de la investigación que se le sigue por promoción a la corrupción y promoción a la prostitución durante 40 años, según el fiscal.
La causa contra el abogado se inició tras una denuncia periodística difundida por Daniel Enz en el semanario “Análisis”, donde dio cuenta de numerosos casos en los que Rivas habría abusado a menores de edad.
Rivas llegó hoy a los tribunales caminado y en soledad. Tras breves minutos dentro del edificio, salió y habló con la prensa, algo que había evitado en su primera presentación ante la Justicia.
“A mí, mi conciencia me dice que muchas personas que tuvieron alguna relación sexual conmigo, nunca se sintieron víctimas y con muchos de ellos seguimos siendo amigos”, dijo Rivas al sitio Análisis Digital.
Rivas negó negó recordar “las edades” de sus compañeros sexuales. “Creo que no eran menores, pero no sé, habrá que ver una cuestión de fechas”, dijo, El ex candidato a gobernador apuntó contra la prensa y el tratamiento mediático.
Al igual que su abogado Raúl Jurado, Rivas también se quejó de no saber quiénes son los denunciantes. Jurado, dijo a Télam que la decisión de no declarar se debe a que “los denunciantes son iniciales” ya que se preservan sus identidades, y afirmó que hasta que no se revelen sus nombres “hay una imposibilidad cierta” de declarar.
“Si yo digo que sucedió tal cosa con J.M.T, es imposible que tomemos en serio esto”, ejemplificó el abogado que tildó de “payasescas” las denuncias contra su defendido y aseguró que con la investigación “se está aclarando por dónde viene la mano”, al tiempo que advirtió que en la causa “hay muchos intereses políticos”, aunque no precisó cuáles.
“Nosotros no podemos hacer nada más que esperar a ver si nos elevan a juicio o no. La decisión de no declarar no es una estrategia, es una clara imposibilidad”, agregó.
El fiscal Beherán adelantó que tiene hasta el momento seis denuncias firmes, además de nueve testigos que sostienen la acusación, y consignó que cuenta con material probatorio que surgió del allanamiento realizado en la vivienda de Rivas el 27 de julio.
Se trata de más de 200 fotografías y casi un centenar de videos, cuyas imágenes son muy elocuentes, según el fiscal.La nota que disparó la investigación fue difundida bajo el título “La doble vida del abogado” y se logró tras un año y medio de investigación de las actividades de Rivas.
“Los cálculos más moderados indican que, por lo menos, corrompió a más de 2.000 adolescentes de entre 15 y 16 años, entre 1970 y más allá del 2010. Les pasaba videos pornográficos, los masturbaba, les practicaba sexo oral y se hacía penetrar o colocar elementos importantes en su ano en encuentros semanales en su casa”, detalló el periodista Daniel Enz en su artículo de investigación.