En medio de las denuncias sobre tráfico ilegal de armas de grupos mapuches en la Cordillera, los gobiernos de la Argentina y Chile acordaron hoy un plan para cerrar en lo inmediato el paso de las fronteras no habilitadas entre ambos países y activar un sistema de cooperación en materia judicial.
Durante una reunión en el Ministerio de Seguridad que encabezó Patricia Bullrich con el subsecretario del Interior de Chile, Mahmud Aleuy; el embajador de ese país, José Antonio Viera Gallo; el secretario de Seguridad Interior, Gerardo Milman; el subsecretario de Coordinación de la Secretaría de Fronteras, Vicente Autiero; el jefe de la División Jurídica del Ministerio del Interior, Luis Correa, y el subsecretario de Desarrollo de Fronteras, Eduardo Bustamante se definió un plan conjunto para frenar la ola de violencia de grupos mapuches que azota en la Patagonia.
“Fue un buen encuentro, productivo y con muchos ejes en común para trabajar en lo inmediato”, dijo a Infobae un funcionario que participó de esa reunión. El acuerdo se alcanzó apenas cinco días después de que la fiscalía de Chile de la Región de Araucanía denunciara el tráfico ilegal de armas de la Argentina hacia el país trasandino por parte de agrupaciones mapuches que sustentan la violencia del Grupo Arauco Malleco (CAM).
De esta manera, hoy se acordó que a partir de octubre de 2017 se instrumentará un plan conjunto de cierre de pasos fronterizos no habilitados en la zona sur de ambos países, con el fin de enfrentar conjuntamente delitos transnacionales como el contrabando y el narcotráfico. “Con este objetivo, se reunirán equipos de trabajo de ambos países para definir y priorizar las primeras acciones”, sostuvo el documento sellado entre las autoridades de ambos países.
En la práctica, según admitieron a este medio funcionarios de la Casa Rosada, la instrumentación de este plan no será fácil de aplicar, ya que existen unos 800 pasos ilegales a lo largo de toda la frontera entre Chile y la Argentina de los 154 puestos de frontera legales. No obstante, los gobiernos de ambos países están dispuestos a reforzar en un principio los pasos ilegales de la zona sur que es donde se registraron los focos de violencia de algunos grupos mapuches y donde presuntamente se detectó el tráfico ilegal de armas.
El pasado fin de semana los Carabineros detuvieron a ocho personas integrantes de una comunidad mapuche vinculada con la CAM por el delito de asociación ilícita con carácter terrorista en la región de Araucanía. La policía chilena encontró en los teléfonos celulares que incautaron a los arrestados comunicaciones registradas en agosto entre líderes de mapuches en Chile a través de los servicios de mensajería instantánea Telegram y WhatsApp. En esos mensajes se referían supuestamente al ingreso al país vecino de fusiles, escopetas, pistolas y balas, según informó la prensa local. Allí se confirmaba que “desde Argentina le iban a llegar 6 escopetas, 10 revólveres, 12 pistolas, 2 fusiles, 250 cartuchos, 550 balas del calibre 38 y 84 balas de 9”. El armamento y las municiones solicitadas estarían destinadas a los diversos ataques llevados a cabo en la zona de Araucanía. En los últimos meses hubo quema de iglesias, casas, camiones y campos en la zona sur de Chile protagonizados por el grupo CAM que está relacionado con el dirigente Jones Huala, detenido en la Argentina por actos vandálicos. Este dirigente mapuche responde a la agrupación RAM que estuvo el pasado 1 de agosto en la ruta 40 cuando desapareció Santiago Maldonado luego de un enfrentamiento con la Gendarmería.
En el plan conjunto que acordaron las autoridades de ambos países se estableció la idea de activar el sistema para la cooperación en materia judicial respecto de antecedentes vinculados a hechos delictivos ocurridos en territorios de ambos países, para lo cual se utilizarán los convenios de colaboración vigente entre policías y a nivel del Ministerio Público.
Aleuy, que viajó especialmente hoy a Buenos Aires para alcanzar el acuerdo con Bullrich, estableció también con la Argentina conformar en los próximos 15 días una comisión mixta de trabajo para abordar los aspectos operativos vinculados a la visita del Papa Francisco a Chile, en el mes de enero de 2018. Es que se prevé una importante proyección de flujos de ciudadanos argentinos que se desplazarán, cruzando la frontera para esa visita histórica. Este comité abordará las posibilidades de reforzamiento de personal, infraestructura y logística de los diferentes pasos fronterizos.
Por otra parte, las autoridades de ambos países acordaron coordinar un trabajo para abordar emergencias por desastres naturales y otro tipo de fenómenos, de manera conjunta, comenzando por los incendios forestales y el combate al fuego.