El juez Ernesto Kreplak pidió hoy formalmente a Uruguay la extradición del sindicalista Marcelo Balcedo y su mujer Paola Fiege, detenidos en ese país desde el 4 de enero, a los que se acusa de liderar una asociación ilícita para perjudicar a los afiliados del Sindicato de Obreros y Empleados de la Minoridad y la Educación (Soeme).
En el escrito, el magistrado detalló los delitos por los cuales se los acusa y reclamó “la entrega de los bienes que se encuentren en la República Oriental del Uruguay y que hubieran sido obtenidos como resultado de los delitos que se investigan en jurisdicción argentina, o que pudieran servir de prueba de la comisión de dichos delitos”.
Hasta ahora hay 61 bienes identificados como parte de la maniobra de lavado, entre autos de lujo, propiedades y embarcaciones.
Además de las mansiones de Balcedo y los autos de lujo guardados en “El Gran Chaparral”, en Uruguay se secuestraron más de USD 7 millones en distintas cajas de seguridad.
El pedido de extradición también menciona la vinculación con la banda Los Monoscomo una de las hipótesis de la causa. “Existen elementos que acreditarían una posible vinculación de miembros de la asociación criminal aludida, en principio en maniobras de lavado de activos procedentes de la comercialización de estupefacientes llevada a cabo por la organización criminal argentina conocida como Los Monos”, detalla el escrito enviado a Uruguay.
En los últimos días, la fiscal Ana Miriam Russo y los titulares de la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), Gabriel Pérez Barberá y Laura Roteta, le pidieron al juez que active el pedido de extradición, que ahora tramitará a través de la Cancillería.
El viernes pasado, Kreplak ya había procesado a Mauricio Yebra como integrante de la asociación ilícita. El testaferro de Balcedo se convirtió en un personaje clave a partir de su ingreso al directorio del gremio: entre el 4 de enero de 2012 y el 31 de diciembre de 2013, retiró unos $80 millones de una cuenta que tenía el SOEME en el Banco Columbia. Luego, gracias al poder general de administración y bancario emitido por Balcedo, endosaba los cheques.