Los empresarios reclaman por el incremento y los choferes esperan que se efectivice el pago de los sueldos.
Los dirigentes del sindicato que nuclea a los choferes de colectivos pedirán que se postergue la audiencia de hoy en la Secretaría de Trabajo, para corroborar el pago del 50% del sueldo de enero de los trabajadores del sector. Si las empresas de colectivos no abonan el saldo, mañana se definirán nuevas medidas de fuerza: no se descarta un nuevo paro de transporte.
La semana pasada los choferes de colectivos, agrupados en la Unión Tranviarios Automotor (UTA), paralizaron durante día y medio las 70 líneas de colectivos de toda la provincia. Además de la huelga, dejaron estacionados los coches en diferentes puntos del microcentro de la capital, en un piquete masivo que sumó embotellamientos a las consecuencias del paro. El reclamo se había producido en rechazo al pago desdoblado del salario de enero.
Desde la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat) habían justificado que la medida se debía a la crisis económica del sector, por la inflación, la suba del dólar y el atraso tarifario. El vicepresidente de la cámara de transportistas, Jorge Berreta, había solicitado la semana pasada un nuevo pedido de aumento: pedían llevar la tarifa en las 14 líneas de la capital de los actuales $ 9,35 (vigente desde enero de 2017), a $ 17 (una suba del 82%). La nueva propuesta es para fijar primero el boleto en $ 13 y aumentar $ 0,50 por mes desde abril hasta noviembre.
En el Concejo Deliberante y la Municipalidad de la capital continúan las negociaciones: podría convocarse a una sesión extraordinaria esta semana para conceder el aumento. En ambos poderes vecinales el objetivo sería resolver el conflicto del transporte público antes de que empiecen las clases en las escuelas.
El principio de acuerdo entre el PJ, que preside el Concejo, y el intendente, Germán Alfaro (Cambiemos), implicaría que mañana sesione la Comisión de Transporte, para dar dictamen a los pedidos de subas de colectivos y taxis. Luego se votarían los incrementos en una sesión extraordinaria que convocaría Alfaro. Sin embargo, la discusión en los pasillos del cuerpo es por la cifra del nuevo boleto: mientras algunos son partidarios de fijar la tarifa en $11,70, resultado del informe de la Subsecretaría de Tránsito municipal; otros ediles están a favor de otorgar un boleto a $ 12,50.
La Provincia tomaría luego el porcentaje otorgado por el municipio para ajustar el valor de la tarifa de las 54 líneas interurbanas y rurales. A pesar de que puede fijar la tarifa simplemente por un decreto reglamentario del Poder Ejecutivo, hace 18 años que la Dirección de Transporte de Casa de Gobierno espera la suba de transporte fijada por la Capital para establecer la tarifa en el transporte provincial.
Desde Aetat habían rechazado que el boleto en la capital aumente a $ 11,70. “No resuelve nada, es como darle una aspirina a un enfermo terminal”, había criticado Berreta, de la empresa Leagás SA, a cargo de la línea 10.
Ajuste de tarifa
Desde Aetat pidieron en diciembre subir el boleto de $ 9,35 a $ 15,98. En enero, los empresarios solicitaron un boleto a $17,04 (una suba del 82%).
La semana pasada pidieron un boleto a $13 con subas mensuales de $0,50, hasta llegar a $17.
Desde UTA advierten que habrá una nueva huelga: “Si no se abona el saldo del sueldo de enero, definiremos nuevas medidas de fuerza”. El secretario general de la Unión del Transporte Automotor, César González, advirtió que podría convocarse nuevamente a un paro del transporte público, en caso de que los empresarios no depositen, como se habían comprometido, el 50% restante del sueldo de enero a los 4.000 trabajadores del sector.
fuente: la gaceta