Luego de 30 años trabajando para Disney, Tom Schumacher se ha convertido en una de las personas más poderosas de Broadway.
El productor continuará cosechando éxitos con el tan esperado musical de Frozen que se estrena en Nueva York. Se espera que el espectáculo, basado en la película animada y que costó más de USD 50 millones, siga los pasos del Rey León y se convierta también en un clásico. El debut de Frozen se da tan solo dos meses después de que Schumacher fuera nombrado presidente de la Broadway League, la organización de la industria responsable de los premios Tony.
Pocas personas han perdurado tanto tiempo como Schumacher en la industria. Sin embargo, una nota publicada en el periódico The Wall Street Journal reveló que en varias oportunidades su comportamiento con sus empleados y compañeros de trabajo ha sido denunciado y cuestionado.
Quienes han trabajado con el productor lo describen como una persona exigente y sumamente inteligente, que sabe exactamente lo que quiere y tiene la habilidad de trabajar con talento creativo para obtenerlo.
/s3.amazonaws.com/arc-wordpress-client-uploads/infobae-wp/wp-content/uploads/2017/06/13110209/Trailer-Olafs-Frozen-1920-1.jpg)
Por otra parte, de acuerdo a la información obtenida por el WSJ, otros aseguran que el productor tiene un comportamiento severo y una tendencia a sobrepasar los límites de lo que es considerado conducta apropiada en el trabajo.
Schumacher ha ofendido a muchos de sus empleados a lo largo de los años utilizando lenguaje sexual explícito, haciendo comentarios indebidos sobre su atracción sexual por sus subordinados e incluso ha sido acusado de hablar sobre pornografía en el ambiente laboral. Testigos contaron que en una oportunidad el reconocido productor se presentó en la oficina en una bata de baño y alardeaba de que estaba totalmente desnudo.
Un allegado a Schumacher dijo que el productor niega todas las acusaciones presentadas en el articulo, a pesar de que The Wall Street Journal confirmó cada uno de ellos con dos fuentes independientes.
La persona del entorno del productor agregó que Schumacher “ha reconocido en ciertas oportunidades haber utilizado lenguaje inapropiado y por esto ha manifestado su arrepentimiento y su compromiso a ser más consciente de ello y seguir las políticas de la empresa en el futuro”.
Por su parte el vocero de Disney aseguró que, “las quejas presentadas son investigadas a fondo y se tomarán las acciones correspondientes”.
El departamento del que está a cargo Schumacher cuenta con aproximadamente 100 empleados y factura entre USD 100 millones y USD 150 millones, según informaron personas con conocimiento de las finanzas de la empresa.
Tom Schumacher, de 60 años de edad, maneja la empresa con gran autonomía ya que su jefe, el conservador presidente de Disney, Alan Horn y su director ejecutivo, Robert Iger, quien raramente visitan las oficinas teatrales en Nueva York.
Bruce Williams, quien trabajó con el productor años atrás. reveló que lo denunció en el año 1994 por acoso sexual. De acuerdo al relato que Williams detalló en The Wall Street Journal, a medida que ambos trabajaban juntos, Schumacher realizó “comentarios lascivos e inapropiados” hacia Williams quien lo denunció ante sus superiores. Al poco tiempo Williams dice que fue contactado por recursos humanos: “Hablamos con Tom y te pide disculpas”, le dijeron. Luego agregaron: “creemos que esta vez sí nos escuchó”.
Cinco ex empleados de Disney confirmaron que estaban al tanto de las quejas presentadas por Williams acerca del mal comportamiento de Schumacher. Sin embargo, voceros de Disney aseguran que no tienen ningún récord de las quejas presentadas por Williams.
Tom Schumacher no ocultó su atracción por Josh Strickland quien interpretó el papel de Tarzán en la versión de Broadway en el año 2006, según detallaron colegas del productor. Schumacher supuestamente alardeaba de haber ido a una sesión de cama solar con el actor donde ambos estaban desnudos. Sin embargo, el representante del ex concursante de American Idol aseguró de que a pesar de que ambos si fueron a una cama solar para lograr el bronceado que necesitaba el personaje, “en ningún momento me sentí incómodo” dijo el actor y agregó que “cualquier sugerencia de nudismo es completamente falsa”.
De acuerdo con sus colegas Schumacher continúa utilizando lenguaje sexual explícito e incluso habla sobre sus erecciones en el ambiente laboral.
El trabajo de Schumacher será puesto a prueba ahora con el estreno de Frozen que lleva cuatro años de producción y tiene un presupuesto elevado para los estándares de Broadway. Se pueden conseguir entradas en reventa por más de USD 2 mil.