Comenzará a regir a partir de junio. La inflación anual llegó en febrero a 6.147,1%.
Jaqueado por la hiperinflación y el desabastecimiento de alimentos, el líder venezolano, Nicolás Maduro, anunció una drástica reforma monetaria: le quitará tres ceros al bolívar, la moneda nacional, que pasará a llamarse “bolívar soberano”.
“He decidido reducir tres ceros de la moneda y sacar de circulación el actual cono monetario y poner en circulación” uno nuevo a partir del 4 de junio, anunció Maduro tras un encuentro con los integrantes de su gabinete económico.
La decisión de reformar por completo el cono monetario tiene un motivo central: la escasez de dinero en efectivo, que se agudizó desde el año pasado, a raíz de una inflación galopante que en febrero alcanzó una tasa anualizada de 6.147,1% según las estimaciones de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora.
Oro y sonrisas. Maduro muestra un lingote en medio de la conferencia en la que anunció una drástica reconversión de la moneda venezolana. (AFP)
De esta manera, una unidad de bolívar soberano será equivalente a 1.000 bolívares actuales. La reforma, según Maduro, busca “avanzar hacía la estabilidad económica del país”, en medio de una fenomenal crisis económica que se traduce además en una constante emigración de venezolanos al exterior.
El actual billete de mayor valor, de 100.000 bolívares, pasará a convertirse en uno de 100. Apenas alcanza para pagar un café en la calle: su capacidad de compra sencillamente pulverizada por la hiperinflación.
Nuevo billete de Bs. S 5 | Vigente desde el 4 de junio de 2018 #ReconversiónMonetaria #BolívarSoberano pic.twitter.com/wXVaHmXi2v
— BCV (@BCV_ORG_VE) March 22, 2018
En simultáneo, Maduro anunció que la preventa del petro -la criptomoneda bolivariana con respaldo de reservas de petróleo- trepó a más de 5.000 millones de dólares, ofertados porcompradores de 133 países, entre los que se destacan China, España, México, Estados Unidos, Alemania, Brasil, Rusia y la Argentina. “El petro ha nacido con fuerza”, afirmó.
Maduro acusó a su par estadounidense, Donald Trump, de “perseguir” a Venezuela con la puesta en marcha de nuevas sanciones económicas, entre las que se incluye la prohibición de cualquier transacción con el petro.
El petro busca aumentar la casi nula liquidez de la economía venezolana, potenciada por una inflación descontrolada. Maduro afirmó que la criptomoneda aspira a convertirse en “eje de la nueva economía”. Pero analistas financieros enrolados en la oposición lo consideran un instrumento mucho más simple: apenas un bono de emisión de deuda.