Entre las jornadas de ayer declararon varios testigos de importancia para la causa. El miércoles fue el turno del arquitecto Julio César Villafañe, contratista de la Dirección de Arquitectura y Urbanismo (DAU) quien habría estado a cargo de parte de la obra referida al juzgado de Monteros.

Luego fue el turno de otra contratista, María Cecilia Lara, comerciante de materiales para la construcción. Le siguieron Benedicto Bonano, Jorge Alberto Chaile y Patricia del Valle Medina, esta última, integrante de la empresa Del Moral, otra de las empresas contratistas.

Por otra parte comenzó con la declaración de Mario Jesús Francisco, dueño de la empresa Del Moral que realizaba conexiones de cloaca y agua.

Al finalizar este testimonio continuó declarando el ingeniero fiscal del departamento de ingeniería del Tribunal de Cuentas, órgano de contralor de la administración pública provincial, Federico Corleau Astorga. La declaración del ingeniero Astorga había sido suspendida días atrás debido a la incorporación de nuevos informes que debían ser estudiados por las partes. Luego de haber respondido ampliamente las preguntas de las partes, el ingeniero concluyó su declaración. A continuación el imputado Miguel A. Brito solicitó ampliar su declaración, solicitud que le fue concedida por el Tribunal.

El testimonio de Federico Coroleu Astorga, podría convertirse en un elemento clave para la acusación contra Miguel Ángel Brito, ex titular de la Dirección de Arquitectura y Urbanismo (DAU) entre 2007 y 2012. El ingeniero del Tribunal de Cuentas relató su participación en los informes de auditoría a la gestión del ex funcionario alperovichista, que está imputado de los presuntos delitos de fraude al Estado y de negociaciones incompatibles con su cargo.

En una inspección realizada en 2015, junto a personal de la DAU y un contador del propio TC, Coroleu Astorga se apersonó en la intersección de la ruta 301 y el camino a la Papelera, en Lules. Allí debía haber una pista de salud con bancos, merenderos, basureros y hasta una ornamentación con troncos de eucaliptos. “La obra es inexistente. Los materiales fueron comprados, pero la obra no está ejecutada”, confirmó el ingeniero fiscal.

Por ora parte, el ex contratista de la Dirección de Arquitectura y Urbanismo (DAU), Julio César Villafañe, ratificó ante el tribunal lo que había dicho en mayo de 2014 y hundió más a Brito y a José Alperovich.

Ante una pregunta de la Fiscalía de Cámara, el arquitecto declaró que hizo trabajos en la casa de Mariana Alperovich, hija del ex gobernador y hoy senador nacional, José Alperovich. “En aquel momento, el ingeniero (y ex titular de la DAU, Miguel Ángel) Brito y el arquitecto (y ex subdirector, Roberto) Bianchi me pidieron si podía terminar urgente la casa, por un problema de tiempo. Yo accedí, obviamente, porque era un trabajo más”, manifestó

El debate se reanudará el próximo martes 15 de mayo a las 8.00 horas. Los días martes y miércoles de la semana próxima se espera agotar con la etapa de declaración testimonial de los testigos citados para pasar a la evaluación de la prueba documental.

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