El ministro Ricardo Buryaile se mostró optimista con la posibilidad de venta de la producción a los consumidores norteamericanos. Además, adelantó próximas medidas para el sector lácteo
El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, adelantó que “hacia fin de año” la Argentina tendría establecido un “mercado abierto de carne con Estados Unidos”, en el marco de la estrategia del gobierno nacional de expandir la presencia de este producto en el mundo.
“El año que viene vamos a recuperar una parte importante de los mercados internacionales, incluso Estados Unidos, con quien vamos a estar quizás hacia fin de año con un mercado abierto de carne”, afirmó Buryaile hoy en diálogo con radio El Mundo.
Buryaile hizo hincapié en la estrategia gubernamental de “recuperar mercados”, después de que se confirmara la caída de las exportaciones cárnicas “que pasaron de 750 mil toneladas en el año 2006 a menos de 250.000 en esta época”.
La expectativa de un mayor giro de ventas vacunas hacia la plaza estadounidense se produce luego de la visita del presidente Barack Obama al país. La cumbre dejó como saldo la firma de varios acuerdos bilaterales y el relanzamiento de la relación diplomática, que en palabras de Mauricio Macri representará en los próximos años una “corriente de inversión muy importante” desde ese país.
Estados Unidos, uno de los mayores importadores mundiales de carne vacuna, cerró su mercado a la Argentina en 2001, a raíz de un brote de fiebre aftosa.
Desde entonces, Argentina protestó en los distintos foros de la comunidad internacional por las trabas a la comercialización de la carne. El año pasado, el país obtuvo un fallo en la Organización Mundial de Comercio (OMC) que le dio la razón a los reclamos argentinos. Resta que Estados Unidos acepte los controles sanitarios implementados por la Argentina para autorizar las importaciones.
Novedades en el mercado lácteo
Además, Buryaile se refirió a la situación de la industria láctea y adelantó que “la próxima semana vamos a lanzar medidas”.
Respecto de las exportaciones, sostuvo que el “mercado lácteo está en una situación muy complicada” y consideró que en este momento pasa una “crisis más profunda y al mismo tiempo más duradera”.