-¡¡¡Eduard querido!!! ¿Qué hace con ese pasamontañas, ese traje de combate y rodeado de tachos de pintura? ¿Acaso se va a enrolar en el Ejército?
-No, mi estimado amigo. Me estoy preparando para enfrentar a la Guardia Urbana Municipal de Yerba Buena.
-¿En serio?
-Sipi.
-¿Y esa arma?
-¿A cuál se refiere mi estimado?
-A la que tiene en la mano. ¡No se haga el vivo!
-Bueno, no se me lo enoje…
-Dígame, ¿esta escenificación tiene que ver con el escándalo protagonizado por los Guardias Urbanos Municipales que golpearon a un joven?
-Sipi.
-¿Y qué tiene que ver eso con los tachos de pintura que lo rodean?
-Es que quiero contarle uno de los pasatiempos de Mauricio Argiró, el responsable del área de Seguridad de Yerba Buena.
-¿Qué pasatiempo?
-Le gusta jugar al paintball…
-¿Qué es eso?
-Son enfrentamientos en los que los participantes disparan balas de pintura, para saber si los adversarios son heridos o muertos…
-Con razón.
-¿A qué se refiere?
-Con razón actúan de esa manera los guardias urbanos, Eduard.
-Quizás también haya alguna película de Rambo o Terminator…
-Ahora me cierra todo. Pero cuénteme un chisme más de la política comarcana.
-Dicen que Alperovich se boicoteará solo.
-¿Por qué dice eso?
-Porque en la sesión del Senado para tratar el aborto legal, votaría igual que Yedlin.
-¿A favor de la muerte?
-Sipi.
-Lo va a criticar todo el mundo.
-Hasta dicen que está por formar un club.
-¿De fútbol?
-¡¡¡No sea zopenco!!! Dicen que integrará el “Herodes Club”.
-¡Qué nombre poco inocente!
-Al contrario de usted, que se está por pagar una pizza con anchoas…
-¡¡¡Ya me jodió de nuevo!!!
Inicio Columnistas De guardias urbanas golpeando vecinos, pasatiempos peligrosos en Yerba Buena y el...