Los jugadores comenzaron a dejar el búnker de Bronnitsy. Sampaoli lo hará recién entre la noche del lunes y el martes.
Las gotas eran gordas. Caían de a muchas desde el cielo gris de Bronnitsy. El domingo triste de la Selección tras la eliminación ante Francia se conjugó con el clima. Ni un poco de sol para recargar un poco de energía después del golpazo en Kazán. Ya había quedado atrás el duelo de un vestuario a pura lágrima, pero sin reproches.
Lionel Messi fue el más golpeado. Visiblemente shockeado, el capitán argentino no abrió mucho la boca. No lo hizo ante la prensa y casi nada entre sus compañeros. No había mucho para decir. Tampoco en la mañana dominguera cargada de angustia todavía. El dolor va a seguir por un tiempo largo en el corazón de Leo y de todos los demás.
Nadie se reprochó nada. Todos entendieron que se llegó hasta donde dio el alma y que fueron superados claramente por una selección francesa que de mitad de cancha hacia adelante en individualidades tenía mucho más que la Argentina de mitad de cancha hacia atrás. Quedó en evidencia.
Entre la lluvia, todo fue saludos y despedidas. Messi fue uno de los que ya partió para reencontrarse con su familia y comenzar el descanso. La mayoría de los que juegan en las ligas europeas también abandonaron la concentración de Bronnitsy. Ya no están en Rusia: Javier Mascherano, Marcos Rojo, Ever Banega, Gonzalo Higuaín, Gabriel Mercado, Eduardo Salvio, Nicolás Otamendi, Sergio Agüero, Cristian Ansaldi, Wilfredo Caballero y Franco Armani.
Justamente Willy transmitió a través de las redes sociales el estado de ánimo del plantel, con un mensaje de paz y también de gratitud hacia los hinchas. “Gracias a los aficionados por llenar los estadios de color celeste y blanco y por el esfuerzo que eso conlleva. El equipo lo dio todo hasta el último segundo y murió de pie, con la cabeza bien alta”, afirmó el arquero a través de su cuenta en instagram.
Los demás se irán con el correr de las horas. El cuerpo técnico retornará en vuelo chárter entre la noche del lunes y las primeras horas del martes. En ese avión privado volarán también a Buenos Aires los sparrings del equipo.