El Gobierno de Donald Trump adelantó que transferirá el control de las cuentas de la empresa estatal en territorio norteamericano al opositor Juan Guaidó, que juró como presidente interino el 23 de enero pasado.
Estados Unidos impuso sanciones a la petrolera estatal venezolana, PDVSA, aumentando la presión sobre el régimen de Nicolás Maduro, desconocido por la oposición y por Washington, así como por la mayoría de los países de América y Europa.
Más pérdida para la petrolera
La medida ordena el bloqueo de USD 7.000 millones en activos de PDVSA en los Estados Unidos. Las autoridades norteamericanas adelantaron que las medidas provocarán otros 11.000 millones de dólares en pérdidas para la petrolera a lo largo del próximo año.
“Estados Unidos ha adoptado medidas necesarias para impedir que el anterior régimen ilegítimo de Maduro continúe saqueando los activos y los recursos naturales de Venezuela”, afirmó el secretario de Estados, Mike Pompeo. “Maduro y sus colaboradores han usado la empresa estatal PDVSA para controlar, manipular y robar al pueblo venezolano durante demasiado tiempo, y en este proceso la han destruido”, continuó.
Toman el control
El secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, dijo sin embargo que la filial de PDVSA en Estados Unidos, Citgo, podrá continuar sus operaciones, siempre que sus ganancias se depositen en una cuenta bloqueada en territorio norteamericano para que pueda ser controlada por la Asamblea Nacional.
“La designación de PDVSA ayudará a evitar futuros desvíos de activos de Venezuela por Maduro y mantener esos activos para el pueblo venezolano”, explicó Mnuchin, y advirtió: “El camino para aliviar estas sanciones es a través de la rápida transferencia del control al presidente interino o un gobierno posterior, elegido democráticamente”.
Ahogo financiero
El secretario del Tesoro remarcó que “con efecto inmediato, en cualquier compra de petróleo venezolano, el dinero tendrá que ir a cuentas bloqueadas”.
fuente: infobae