Las cardiopatías son la principal causa de muerte en el mundo y están estrechamente ligadas con la alimentación, al igual que otras afecciones y dolencias, como: la diabetes, el cáncer, el mal de Párkinson o el Alzheimer. Los hábitos alimenticios se relacionan con las emociones, las costumbres y cultura, por esta razón modificarlos es tan difícil. Afortunadamente la conciencia y el acceso a cierta información sobre el tema ha llevado a muchas personas a replantearse ciertas prácticas habituales. La economía es otro factor que muchas veces perpetúa la mala alimentación, pero se puede comer sanamente sin gastar tiempo y dinero de más. En esta nota te contamos cómo lograrlo:
Planificación
Muy pocas personas lo hacen, pero un plan semanal es ideal para llevar una dieta sana y balanceada, sin gastar de más. Permite enfocarse en la variedad y en el aporte de nutrientes a nuestro organismo. No es bueno comprar un montón de frutas y verduras que jamás se probaron antes, lo mejor es hacer una lista concentrándose en alimentos conocidos e ir agregando tan solo uno nuevo, de vez en cuando.
Adiós a los alimentos industriales
Los alimentos naturales son más sanos y económicos que los procesados, por eso es importante ir desterrando de la dieta a estos últimos. Optar por frutas, verduras, legumbres y cereales, así como por miel o azúcar sin refinar para los postres y desayuno. Se pueden sustituir los snacks industriales por versiones saludables: calabaza horneada con un toque de aceite de oliva, ajo y especias a gusto, chips de pepinos, palitos de zanahoria y apio con queso. Para los amantes del dulce, una riquísima opción es colocar leche de almendras con vainilla, chía y miel, luego refrigerarlo por 15 minutos y acompañar al servir con fresas frescas. Las uvas congeladas son una tentación para cualquiera que las pruebe. Sumado a todas estas opciones, si no tuviste tiempo de ir al supermercado o tuviste una larga semana, no es necesario saltarse comidas o desequilibrar la dieta, existen cada vez más alternativas para pedir comida saludable por delivery.
Priorizar los vegetales
Si bien la carne aporta nutrientes, los mismos pueden conseguirse en alimentos de origen vegetal como cereales y legumbres. Las ventajas de estos últimos frente a la carne es que son más económicos, además de que admiten una enorme variedad de preparaciones. Para sumar beneficios, los alimentos de origen vegetal no provocan aumento en el colesterol o ácido úrico, como sí lo hacen los cárnicos. No es necesario renunciar a la carne si no se lo desea, pero es importante y conveniente para la salud y la economía que el consumo no sea excesivo.
Elegir frutos de estación
Las frutas y vegetales de temporada son siempre más económicos, además de que su forma de cultivo usualmente es mucho más sana y pueden conseguirse en el mercado local. Por todas estas razones, lo mejor es siempre optar por ellos y buscar diferentes recetas para prepararlos. Internet es una fuente inagotable de inspiración sobre comida saludable.
Ofertas
Siempre es bueno dejar en la planificación semanal un espacio para aprovechar las ofertas en frutas y verduras, también en especias que sean consumidas a diario. Muchas veces se encuentran precios que no pueden rechazarse, por eso es importante una cierta flexibilidad a la hora de comprar alimentos de origen vegetal, siempre que coincidan con el equilibrio de la dieta.
¿Qué otros trucos tenés para incorporar hábitos más saludables en tu dieta de todos los días?