Una mujer de 30 años fue asesinada con dos disparos en la cabeza en su departamento en localidad bonaerense de Caseros y horas más tarde detuvieron a un amigo suyo que tenía llaves de la casa y un arma en su poder.
El pero resultado
Carmen Alejandra Luján, empleada ferroviaria de la línea San Martín, no contestó el teléfono en todo el domingo. Sus familiares, preocupados por la falta de respuestas, fueron hasta el departamento del edificio ubicado en la calle Amadeo Sabattini al 4700, donde vivía hacía unas semanas, y se encontraron con la puerta abierta y el cuerpo de Carmen tendido sobre un charco de sangre en su habitación.
El móvil
Efectivos de la comisaría 1ra de Tres de Febrero que se acercaron al lugar descartaron de inmediato un robo ya que no había desorden, no faltaban objetos personales y estaban ahí todavía listas las valijas que Carmen había preparado para viajar a Cuba este lunes.
La palabra de la familia de la víctima
Los familiares apuntaron entonces contra Sergio Elvio Fernández (35), un amigo cercano de la víctima, que tenía llaves del departamento y “estaba obsesionado con ella”. Testimonios confirmaron a la policía que él había estado ahí esa mañana.
La confesión
Horas más tarde, “Teco” Fernández se presentó ante personal de la Policía de la Ciudad en el barrio porteño de Parque Patricio y aunque en un principio intentó explicar que Carmen era su novia y que se había suicidado delante de él, terminó confesando el crimen. En su poder tenía un revólver calibre 32 sin numeración que había sido disparado dos veces y quedó detenido e imputado por el femicidio.
“El que conoce a Carmen sabe que con ‘Teco Fernández’ no había relación amorosa sino amistad, esa amistad asesina que él no pudo soportar”, publicó María Luján, la hermana de la víctima, en redes sociales. “No se lo esperaba, ella como todos nosotros lo veía como un hermano y el hijo de puta la mató”.
Néstor, su padre, contó también que ellos se habían conocido hacía seis años en el trabajo y, después de que lo despidieran, la relación siguió. “Él estaba obsesionado pero mi hija nunca le llevó el apunte”, agregó y denunció que Fernández le robó también los euros y dólares que Carmen tenía preparados para viajar.
Tras su aprehensión, Fernández había quedado a disposición del Juez Nacional en lo Criminal 14 Ricardo Farías, quien se desentendió de la causa y lo remitió a la seccional de Tres de Febrero.
La fiscal Marcela Acosta, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 6 del Departamento Judicial San Martín, quedó a cargo del caso y dispuso que se realice la autopsia correspondiente.