La pérdida involuntaria de masa muscular o sarcopenia, conduce a una disminución en la fuerza y en la funcionalidad del músculo y suele darse en los adultos mayores. El Centro de Información Nutricional de la Carne de Pollo destaca en un informe cómo puede prevenirse a través de la alimentación, sobre todo mediante el consumo de carne de pollo.
La sarcopenia se da en el contexto del paso normal de los años, pero puede acentuarse si coexiste con alguna enfermedad. El tratamiento para este proceso se basa en la prevención, que consta de dos pilares: actividad física y nutrición adecuada. En el último caso, una correcta ingesta de proteínas es fundamental para el desarrollo y mantenimiento de la masa muscular.
Una aliada al organismo
La carne de pollo es una aliada en la prevención de la sarcopenia porque cubre más del 50 % de la recomendación diaria de proteínas. Las proteínas del pollo son de óptima calidad porque contienen todos los aminoácidos esenciales y son fácilmente asimilables por el organismo.
Fácil de comer y rica
Asimismo, es de fácil masticación y digestión, tiene un sabor suave y agradable, es versátil -lo que permite incluirla en diversas preparaciones- y accesible. Todo esto la convierte en una fuente de proteínas de elección en la alimentación del adulto mayor, que es en quienes suele observarse una disminución de la ingesta calórica total.
Sarcopenia es la pérdida degenerativa de masa muscular y fuerza al envejecer o al llevar una vida sedentaria. Cerca de un tercio de la masa muscular se pierde con la edad avanzada.