En medio del actual contexto recesivo, las ventas en los supermercados y shoppings volvieron a derrumbarse en febrero, por octavo mes consecutivo, según informó el Indec.
En el caso de los centros de compras, la contracción a precios constantes –es decir, sin considerar la inflación– fue del 17,6%, la segunda caída interanual más alta desde octubre. Ese mes, la baja respecto del mismo mes del año pasado había sido del 18,6 por ciento. Con este último dato, el bimestre marcó una caída del 16,3 por ciento.
A su vez, las ventas a precios corrientes en febrero alcanzaron $5.506,2 millones, lo que representa una suba del 22,6% respecto del mismo mes del 2018. Los rubros que mostraron mayor crecimiento fueron “Perfumería y farmacia” (57,6%); “Ropa y accesorios deportivos” (55,0%); “Librería y papelería” (33,7%); “Indumentaria, calzado y marroquinería” (31,1%) y “Otros” (30%). Los más afectados, por el contrario, fueron “Electrónicos, electrodomésticos y computación” (-10,9%); “Diversión y esparcimiento” (-5,3%) y “Amoblamientos, decoración y textiles para el hogar” (+4,6%).
Los supermercados, en tanto, reflejaron una merma del 12,1% a precios constantes respecto de febrero del año pasado y acumularon en el primer bimestre del año un derrumbe de 11,3 por ciento. En este caso, también fue la segunda caída más fuerte de los últimos ocho meses; luego del número de noviembre, que mostró una disminución de las ventas del 12,4% interanual.
A precios corrientes, las ventas en supermercados sumaron $44.592,1 millones,equivalentes a un alza del 40,5% interanual. Las ventas online alcanzaron los $678 millones, cifra que si bien refleja un crecimiento del 78,7%, todavía representa un porcentaje mínimo del total de ventas (1,5%). A su vez, el ticket promedio fue de $628, precisó el organismo estadístico.
En el caso de los autoservicios mayoristas, el Indec reflejó que en febrero sus ventas alcanzaron $7.041 millones, que representa 43,6% más que el año pasado, de los cuales apenas $39 millones fueron gastados mediante la comercialización online.
Las caídas en shoppings y centros de compras se vienen registrando desde mediados del año pasado y se relacionan con la baja de la actividad económica, la inflación, la pérdida del poder adquisitivo por paritarias que no ajustaron, y el impacto en el empleo. Las perspectivas hacia adelante no son más alentadoras, menos en un contexto de gran incertidumbre electoral, que genera un clima adverso en los mercados.