El juez juez de Control y Garantías de Las Termas, Silvio Sálice, concedió eximición de prisión a un tatuador reconocido, como primer round de una pelea que incluye redes sociales y denuncias de “casi” extorsión con videos prohibidos.
El prólogo de la historia sobrevino cuando madre y una hija recibieron por Whatsapp un video. La mujer lo abrió y descibrió que otra hija, de 15 años, tenía sexo con un sujeto.
Al indagarla, la jovencita habría señalado que tenía una relación hace 4 meses y que todo terminó mal. Sobrevino la denuncia, en cuyos detalles la mujer acusó a un tatuador mayor de edad.
Urgente, los abogados Yésica Serrano y Javier Leiva presentaron un pedido de eximición de prisión en el Juzgado de Las Termas. Por las dudas, el tatuador bajó el perfil y desapareció del mapa termeño, hace casi diez días.
Disputa legal
En la víspera, Zanni se presentó en audiencia y reclamó el rechazo de la eximición, por afirmar que menor es igual a abuso. En esencia, subyacería el delito “abuso por aprovechamiento de la inmadurez de la víctima”.
Sin embargo, Leiva y Serrano se plantaron en una estrategia contundente. “El hombre del video no es nuestro cliente”. Solicitaron pericias psicológicas y/o psiquiátricas para la madre de la menor.
Desde la semántica, la defensa ahondó: “Nuestro defendido tiene una familia y sospechamos que el fin es extrajudicial”.
También, ofrecieron como testigos a una ex y a su actual pareja, trascendió.
Ataque al pasado
En la jornada, la defensa instó al juez a investigar profundo, indicando que la madre de la menor habría hecho lo mismo con un comerciante que tuvo sexo, también, con una hija suya.
Asimismo, la Justicia merituó la situación actual y el magistrado supeditó todo a la Cámara Gesell, próxima a concretarse.
En ella, los funcionarios escucharán a la adolescente, ante psicólogos y los propios abogados del sospechoso.
En principio, las partes coniciden en la ausencia de violencia, pero la edad de la jovencita deja en claro el impedimento para una relación sexual entre un adulto y una menor de 15 años.
Zanni sostiene que se trata del tatuador, pero su defensa responde que no va a caer como lo hizo un comerciante tiempo atrás.
Ahondó que el hombre desembolsó dinero y evitó el “escarnio” público, con las mismas protagonistas.
fuente: elliberal