El único aumento del año fue un 10,6% en marzo y a fines de agosto quiere subirlo un 30% más. Acumula un atraso de más de 24 puntos porcentuales en los últimos 12 meses.
La aceleración de la tasa de inflación debilitó el poder de compra de los salarios entre un 8% y 12% en la primera mitad del año.
Pero en el caso del salario mínimo vital y móvil que tuvo un sólo aumento en la primera mitad del año, fue en marzo un 10,6%, a $12.500 por mes, equivalente a $500 por día y $62,50 la hora, acumuló una suba nominal de 31,6% en los pasados 12 meses. Acusó una pérdida de poco más de 24 puntos porcentuales en un año respecto del 55,8% que en ese período registró la tasa de inflación que informó el Indec.
De ahí que como ocurriera en 2018 el Ministerio de Trabajo e Industria se preparara para convocar el Consejo del Salario, el Empleo, y la Productividad, integrada por dirigentes sindicales y de entidades gremiales empresarias para discutir la actualización del SMVyM, pero para la semana posterior a las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias.