En plaza Independencia se llevaron a cabo actividades de concientización sobre la obesidad.
Para conmemorar el Día Nacional de Lucha contra la Obesidad se reforzaron las tareas de concientización, prevención y sobre todo sensibilización de que la obesidad es una enfermedad que debe ser tratada, así lo expusieron en distintas carpas que se instalaron en plaza Independencia.
La obesidad es, después de la pobreza, la segunda causa de discriminación del país, por eso con la consigna “La obesidad es una enfermedad ¡No discrimines!” se desplegaron una serie de actividades diagramadas por el Programa de Atención Integral de Obesidad (PAIO), su referente, Francisco D’Onofrio, contó: “Esta patología afecta a niños, adolescente, adultos, no respeta clases sociales y es alarmante el crecimiento de casos en los más pequeños y en jóvenes”.
En Argentina la tasa de prevalencia de exceso de peso en menores de cinco años es del 10 por ciento; de cinco años a 19 es del 40 por ciento; y en adultos, de acuerdo a los últimos reportes, llegó al 61 por ciento, de esa cifra el 25 por ciento padece obesidad y el 36 por ciento restante exceso de peso.
A partir de estos datos, Argentina tiene la segunda tasa más alta de sobrepeso en menores de 5 años de América Latina y el Caribe. “Hay que tomar medidas urgentes en prevención, trabajando de manera interdisciplinaria, involucrando distintas áreas como Educación, Desarrollo Social y otros sectores más, sobre todo para concientizar que se trata de una enfermedad que debe ser tratada y que, quienes la padecen, no deben ser discriminados”, resaltó D’Onofrio.
Lucia Vallejo Trejo es una de las nutricionistas del PAIO y remarcó en este sentido el trabajo que vienen realizando desde el Cepta (Centro Provincial de Trastornos Alimentarios), quienes reciben a pacientes con obesidad mórbida o trastornos alimentarios que son derivados de los distintos servicios de centros de salud. Ahí, quienes padecen esta enfermedad, reciben un tratamiento integral, con un seguimiento y acompañamiento permanente de distintos profesionales de la salud para lograr el mejor de los resultados.
Fabrizio Scacchi es investigador del PAIO y del Cepta, y asegura que lo más preocupante es la obesidad en los más pequeños, y uno de los factores que más influyen en ello es el sedentarismo, más en momentos como el actual donde la accesibilidad a dispositivos tecnológicos modifica los hábitos de entretenimiento y esparcimiento en los niños.
Se puede
Un grupo de pacientes del PAIO y del Cepta participaron en las actividades, contando sus experiencias y alentando a iniciar el tratamiento.
María de los Ángeles (43), es paciente bariátrica hace dos años ya. Estuvo cinco años con un tratamiento en el Centro de Salud. Comenzó este camino hacia una mejor calidad de vida con 136 kilos. Siguió el proceso en el Cepta, ahí logró ingresar al quirófano con 100 kilos. “Mi mensaje es que se puede, empezando a incluir hábitos sencillos como comer sano, hacer actividad física, tomar dos litros de agua por día. Hacerlo todo de a poco, evitar el efecto rebote, es más importante bajar lento y seguir bajando”.
María Eugenia (62), va bajando 30 kilos. En diciembre comenzó su tratamiento con el PAIO y resaltó la calidad humana de los profesionales que la acompañaron en este proceso. “Lo principal es comer saludablemente, no hacer una dieta estricta, sino elegir lo más sano. Hay que animarse porque se puede”.