El ministro de Economía de la Nación expuso ante los legisladores de la Cámara baja sobre la estrategia del gobierno nacional en el proceso de renegociación de la deuda externa. “El FMI es responsable por la crisis de deuda y económica que la Argentina vive hoy”, remarcó.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, advirtió en el Congreso Nacional que el gobierno no va “a permitir que fondos de inversión extranjeros marquen la pauta de la política macroeconómica” y remarcó que, en el proceso de renegociación de la deuda externa, “la sociedad argentina está primero”.
Ante representantes de la CGT, los empresarios, la Iglesia, intendentes y funcionarios, Guzmán expuso durante poco más de una hora ante el plenario de la Cámara baja, trazó un panorama de la situación del país en relación a la deuda y habló de los desafíos a futuro pero aclaró que no iba a dar detalles públicos de la negociación.
El ministro habló en el marco de una sesión especial, ante un recinto casi a pleno -se registraron unas treinta ausencias- y en la que la mayoría de los bloques opositores tuvieron la posibilidad de formularle preguntas, más allá de las que le habían adelantado por escrito.
“Los detalles sobre la negociación no se adelantan para proteger a la sociedad argentina, y porque estamos en una negociación justamente”, dijo Guzmán al exponer el mismo día en que llegó al país una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI), que auditará las cuentas públicas y mantendrá diversas reuniones con funcionarios del gobierno nacional.
Juntos por el Cambio, principal bancada opositora de Diputados, decidió concurrir al recinto para escuchar al ministro pero, en disconformidad con los tiempos asignados para preguntar, no participó de las preguntas posteriores a la primera exposición de Guzmán.
Pese a ello, el funcionario agradeció en más de una oportunidad a Juntos por el Cambio y al resto de los bloques opositores por el apoyo en la sanción de la ley de renegociación de la sostenibilidad de la deuda externa.
Preciso y enfático en su exposición, el ministro recibió el primer aplauso de la tarde cuando sentenció: “No vamos a permitir que fondos de inversión extranjeros marquen la pauta de la política macroeconómica”.
“Es hora de dar vuelta la página y decirle nunca más a los ciclos de endeudamiento. Hay que acabar con esto para vivir en una Argentina tranquila y con oportunidades”, aseveró y remarcó: “Nunca más a los ciclos de sobreendeudamiento. Nunca más a ciclos que destruyen oportunidades”.
Al trazar un panorama de la situación de país, el ministro dijo que “en los últimos 2 años, 465 mil argentinos entraron en situación de indigencia, y la pobreza aumentó del 28,6% al 35,4%”.
“El país tiene una carga de deuda insostenible. Esto es la consecuencia de un esquema económico que estuvo muy lejos de ser exitoso, el colapso de ese esquema”, dijo apuntando al gobierno anterior.
Además, recordó que “Argentina accede al mercado de crédito internacional en 2016 y se vende esta idea de la lluvia de inversiones y la realidad está a la vista: nada de esto ocurrió. Vino deuda pero nunca llegó la inversión productiva”.
“El horizonte que buscamos es consistencia macro económica, dinamismo, crecimiento e inclusión social”, adelantó Guzmán.
Consideró también que “es condición necesaria para romper una dinámica de recesión que se profundiza, sacarse de encima esa carga de deuda que no se puede pagar”.
En su exposición, apuntó también contra el FM al señalar que “el préstamo más grande de la historia se utilizó para pagar deuda y para financiar la salida de capitales” y dijo que el organismo internacional “también es responsable de la crisis que la Argentina tiene”
“No se cumplieron los objetivos del programa con el FMI: no ayudó a estabilizar. Pero sí se cumplieron las premisas. El gobierno anterior hizo todo lo que pedía el Fondo”, insistió.
Por último, Guzmán se refirió a los tenedores de bonos: “Está claro con estos números que es necesaria una reestructuración de la deuda. Va a haber frustración de los bonistas”.
“Tenemos que tomar compromisos que sí se puedan cumplir, con senderos fiscales y comerciales que sí podemos cumplir. La sociedad Argentina está primero”, concluyó.
Presencias
Representantes de entidades sindicales, empresarias, de organizaciones no gubernamentales y de la Iglesia, así como intendentes y funcionarios de diversas áreas asisten a la exposición.
Dirigentes de la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de Trabajadores Argentinos (CTA), la Confederación General Empresaria, la Unión Industrial Argentina, Apyme, ABA, Adeba y Came ocupan los palcos del recinto de la Cámara baja.
Asimismo, los ministros de Desarrollo Social, Daniel Arroyo; de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; de Trabajo, Claudio Moroni; de Agricultura, Luis Basterra; y de Transporte, Mario Meoni, también llegaron hasta el Congreso para acompañar la exposición de su par del gabinete.
Intendentes y rectores universitarios también están en la sesión, al igual que el director y presidente de la Pastoral Social de la Arquidiócesis de Buenos Aires, el padre Carlos Accaputo.
Las principales autoridades del Banco Central, la AFIP y la Comisión Nacional de Valores también asisten a la exposición.
Movilización en respaldo a Guzmán
Organizaciones sociales y políticas se congregaban en las afueras del Congreso para expresar su apoyo a las negociaciones encaradas por el Gobierno en relación a la deuda pública externa, mientras el ministro de Economía, exponía en el recinto de la Cámara de Diputados.
La movilización, impulsada por la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP), incluía ollas populares y la instalación de un escenario sobre la avenida Entre Ríos, donde está previsto que todos los representantes de las organizaciones que participan brinden un discurso ante los manifestantes.
A la UTEP se sumaron también la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), las dos líneas de la CTA, la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) y la Asociación Bancaria (AB), entre otras organizaciones.
La movilización se inició a las 17 y partió desde el centro porteño hacia el Congreso, donde el ministro de Economía exponía ante la Cámara de Diputados sobre el proceso de reestructuración de la deuda.
Marchas en contra del FMI
Por su parte, militantes del Frente de Izquierda y los Trabajadores (PTS, PO y MST) se concentraron en 9 de Julio y avenida de Mayo, y marchaban hacia la Plaza de Mayo, bajo la consigna “Llega la misión del FMI-Malvenidos” y en rechazo al “pacto Gobierno-oposición” para renegociar la deuda.
Más temprano, otras organizaciones realizaron ollas populares en el Obelisco y marcharon hasta las oficinas porteñas del FMI, en rechazo a la llegada al país de una delegación de ese organismo multilateral de crédito, en vísperas de una nueva negociación sobre los vencimientos de la deuda.
El Frente de Organizaciones en Lucha (FOL) y el Frente Darío Santillán fueron parte de la actividad que desarrollaron a partir de este mediodía un total de once organizaciones sociales y políticas, que se congregaron en el Obelisco, en el cruce de las avenidas 9 de Julio y Corrientes.
Poco después de las 13, los manifestantes emprendieron su marcha hacia las oficinas porteñas del FMI, ubicadas en Paraguay y 9 de Julio.
“La deuda es con el pueblo, no con el FMI”, dijeron voceros de FOL en diálogo con Télam y remarcaron que su reclamo pasa por la “suspensión del pago” de las obligaciones que Argentina tiene con el FMI y la puesta en marcha de una investigación sobre los fondos que reclaman los acreedores.
En tanto, como parte de una jornada nacional, las movilizaciones en rechazo a la presencia de la delegación del FMI en la Argentina se replicaron hoy en distintos puntos del interior del país, como fue el caso de las ciudades de Córdoba y de Mar del Plata.