Federico Benvenuto, de 33 años, estaba preso en la cárcel de Marcos Paz. “Llevame, igual mañana me voy de nuevo”, les dijo desafiante a los agentes tras ser capturado por robar un local en Almagro.
Federico Benvenuto, de 33 años, salió el martes de la cárcel de Marcos Paz. Su tiempo fuera de las celdas, sin embargo, fue efímero. El miércoles por la tarde, la Policía de la Ciudad lo encontró robando un comercio de Almagro y lo detuvo.
Apenas unas horas después de que la Sala III de Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional aprobase su salida de la Unidad 2 del penal bonaerense, Benvenuto volvió a delinquir. Cerca de las 16.20 del miércoles, entró a una heladería ubicada sobre la avenida Rivadavia al 4500 y se llevó la recaudación del día, $620.
Minutos más tarde, dos efectivos de la fuerza porteña que circulaban por la zona observaron al delincuente correr entre los peatones, dándoles empujones, lo cual les llamó la atención. Los oficiales lo persiguieron y lo alcanzaron en la intersección de las calles Yatay y Lezica.
La sorpresa llegó al momento de identificarlo: los oficiales encontraron en uno de sus bolsillos un oficio donde figuraba que ayer había sido liberado de la cárcel de Marcos Paz por el Tribunal de Casación.
Al consultarle por esto, Benvenuto increpó a los uniformados y, según relató el parte policial difundido en los medios, aseguró que le habían dado la libertad para evitar la propagación de la pandemia del COVID-19. A su vez, mientras era arrestado, el detenido gritó de forma irónica: “Qué me importa que me lleven preso, ayer (por el martes) salí del penal de Marcos Paz por el coronavirus. Llevame, igual mañana (por el jueves) me voy de nuevo”.
Sin embargo, posteriormente trascendió un fallo judicial que contradijo la versión de que había sido liberado en el marco del polémico fallo de la Cámara de Casación Bonaerense, que benefició a más de mil delincuentes condenados con la prisión domiciliaria.
“Ante la posibilidad latente de que no se encuentre psicológica y/o psiquiátricamente apto para comprender la criminalidad de sus actos y además para discernir acerca de los avatares que demandan su capacidad de afrontar un juicio penal…, habrá de disponerse el cese de su detención cautelar, ordenar la libertad del imputado y disponer la inmediata intervención del Juzgado Nacional en lo civil N° 76”, especificó el escrito. En efecto, el hombre se había fugado del Hospital Borda a fines de 2019.
El caso quedó bajo la tutela del Juzgado Criminal y Correccional Nº 57 de Capital Federal, a cargo de la doctora Fabiana Galletti, y la Secretaría Nº 61, del doctor Osvaldo Vázquez. Benvenuto fue trasladado a la comisaría de la zona, donde quedó alojado a la espera de las actuaciones judiciales de rigor.
fuente. infobae