Al igual que ocurrirá en Diputados, el Senado realizará hoy una serie de pruebas para comprobar el correcto funcionamiento del sistema de videoconferencia que se utilizará la semana que viene para debatir la validez de más de veinte decretos de necesidad y urgencia (DNU), firmados por el Poder Ejecutivo desde la declaración del aislamiento obligatorio por el coronavirus.
Las autoridades de la Cámara Alta, encabezada por la vicepresidenta Cristina Kirchner, llevarán adelante hoy un primer ensayo en el que los legisladores deberán ingresar a la red con sus respectivas cuentas y se simulará una votación para así evitar errores cuando realmente se lleve adelante la sesión virtual.
Se hará también un simulacro general, del que incluso participará la propia titular del recinto, aunque en ninguno de los dos casos habrá público presente. Dado el carácter privado de ambas pruebas, la Comisión de Medio Ambiente tuvo que cancelar la audiencia que iba a realizar con el ministro del área, Juan Cabandié.
La modalidad de videoconferencia será utilizada por el Senado por primera vez en su historia ante la imposibilidad de organizar una sesión presencial para conservar el distanciamiento social y evitar contagios masivos en el marco de la pandemia del coronavirus.
Lo que se probará en esta ocasión es todo el funcionamiento del nuevo sistema. El martes hubo un pequeño ensayo y los responsables técnicos del Senado no registraron inconvenientes.
La Cámara Alta tiene previsto reunirse el próximo miércoles desde las 14, para celebrar una sesión especial en la que se van a analizar los últimos DNU firmados por el Gobierno. A principios de esta semana, Cristina Kirchner emitió un decreto parlamentario en el que estableció prerrogativas para los debates legislativos por Internet.
Cuando se realice el encuentro virtual, en el recinto sólo podrán estar la vicepresidenta, el secretario parlamentario, el peronista Marcelo Fuentes, y el prosecretario parlamentario, el radical Juan Tunessi.
Las demás autoridades -la presidenta provisional, la peronista santiagueña Claudia Abdala de Zamora; el vicepresidente, el radical porteño Martín Lousteau; el vicepresidente primero, el misionero del Frente Renovador Maurice Closs; y la vicepresidenta segunda, la cordobesa de PRO, Laura Rodríguez Machado- estarán dentro del edificio, pero solamente podrán ingresar al hemiciclo a reemplazar a la titular de la Cámara en la moderación de la sesión.
El resto de los senadores podrá estar en sus casas o en algún lugar oficial con un buen ancho de banda. Incluso, en sus despachos, ubicados a pocos metros de la sesión, la cual no podrá durar más de seis horas por cuestiones técnicas.
De ese tiempo, al menos treinta minutos deberán estar destinados a la votación que se llevará a cabo mediante un método similar al que se utiliza en las sesiones presenciales. Los votos se verán reflejados en el tablero ubicado en el recinto. Si el método electrónico fallara, entonces se hará este procedimiento a viva voz mientras los responsables de la Secretaría Parlamentaria pasan lista.
En caso de desperfectos técnicos que interrumpan el desarrollo de la sesión por videoconferencia, Cristina Kirchner podrá llamar a un cuarto intermedio hasta que se resuelvan las dificultades. Las deliberaciones y decisiones tomadas hasta ese momento serán consideradas válidas.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Massa, se reunió con los principales referentes de la oposición y les informó que este viernes habrá capacitaciones, mientras los técnicos del Congreso solucionan los errores que mostró el ensayo de esta semana en el sistema.
Aunque en este caso ya quedó descartada una sesión a distancia para este sábado, si están dadas las garantías técnicas, el oficialismo convocará nuevamente para los próximos días. Caso contrario, se llamará a una mixta con una parte de los legisladores en sus bancas en el recinto y otra mitad o tercio en forma remota, según las indicaciones médicas para mantener las normas de cuidado sanitario.
fuente: infobae