Claudio Tapia, el sanjuanino de 52 años que fue reelecto como presidente de la AFA en una Asamblea virtual compuesta por 43 dirigentes y cuyo mandato por otro período será hasta al 2025, con chances de extenderlo cuatro años más. Tapia es quien decidió que terminen todos los torneos y dejó a San Martín de Tucumán sin ascenso, pese a ir primero.
Para ser reelecto, Tapia contó con el apoyo de todo el ascenso y el regreso de todos los grandes. Se trata de un espaldarazo muy pesado para el hombre que comenzó siendo barrendero, luego centrodelantero en Barracas Central y Dock Sud e que es hincha de Boca. Fue presidente del propio Barracas y está al mando de la AFA desde 2017.
Presidente número 46
Se trata, al fin de cuentas, del presidente número 46 de la poderosa AFA -además tuvo 11 interventores-, el hombre que desde el 2010 fue parte de los viajes de la Selección e hijo, también, de aquel bochornoso 38-38 porque si Luis Segura -Chiqui era su vice- o Marcelo Tinelli hubieran ganado aquella elección a finales del 2015, nada de esto hubiera sido posible. Tampoco habría sido factible su acceso al sillón de Viamonte 14 meses después sin padrinos y el apoyo clave del Ascenso.
Con sus viejos conocidos de las categorías menores le hizo frente a la Primera División y los poderosos de la A que lo entendieron, apuntalaron su candidatura: Hugo Moyano -entonces su yerno- y Daniel Angelici -entonces su amigo-. En ese momento, River y San Lorenzo se quedaron afuera de una gestión que, en tres años, acomodó las finanzas y afianzó el proyecto Selección: luego del mal paso de Sampaoli, Tapia sostuvo a Scaloni y relanzó las Juveniles.
fuente: olé