La Cámara de Diputados aprobó el decreto de necesidad y urgencia que creó el Ente Nacional de Comunicaciones y desactivó puntos clave de la antigua ley con la que el gobierno de Cristina Kirchner intentó controlar a los medios independientes
El Congreso, con el voto de la coalición oficialista Cambiemos, del massista Frente Renovador y un sector del peronismo, puso hoy punto final a la Ley de Medios del kirchnerismo. Lo hizo con la aprobación en la Cámara de Diputados del decreto de necesidad y urgencia que firmó al principio de su mandato el presidente Mauricio Macri, que creó el Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) y dejó sin efecto puntos centrales de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
Según la normativa vigente, con la aprobación de una de las dos cámaras del Legislativo, los DNU quedan aprobados de manera definitiva y tienen caracter de ley. En la sesión de Diputados –que en principio contó con la presencia de Máximo Kirchner, aunque luego dejó el recinto convalidó la decisión de Macri de crear el ENACOM, un organismo que concentra las funciones que antes tenían la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) y la Autoridad Federal de Tecnología de la Información y las Comunicaciones (Aftic).
La bancada del Frente para la Victoria abandonó el recinto en el tramo final de la sesión, luego de protestar porque el macrismo logró una mayoría ajustada para aprobar la iniciativa que pone punto final a la ley que la gestión de Cristina Kirchner utilizó contra los medios de comunicación independientes.
A la coalición política conformada por el macrismo, la UCR y la Coalición Cívica le costó esta segunda sesión del año, ya que recién pasados los 15 minutos del tiempo reglamentario de espera logró con el ingreso de la massista Graciela Camaño y parte del bloque del delasotismo reunir los 129 presentes que exige el quórum, dando muestra de la necesidad de acompañamientos del peronismo disidente para sesionar.
A la hora de la discusión de los DNU, Pablo Tonelli, miembro informante de Cambiemos, sostuvo que el DNU que promueve la creación del ENACOM, que asume las funciones de la Afsca y la Aftic disueltas en la misma norma, y realiza modificaciones a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, “satisface los recaudos formales y sustanciales exigidos en la Constitución Nacional”.
Desde el Frente para la Victoria, el camporista Marcos Cleri sostuvo que el decreto “viola el principio federal”, pero además consideró que “se avasalla el Congreso nacional, no sólo porque no se lo citó, sino porque los directores propuestos fueron removidos”, en referencia a los titulares de los organismos disueltos, los ultrakirchneristas Martín Sabbatella y Norberto Berner, respectivamente.
En tanto, desde el massismo Raúl Pérez justificó el acompañamiento del Frente Renovador pero reclamó al oficialismo que “cumpla con lo que el decreto dicta en la constitución de una comisión redactora y una comisión bicameral” y le aconsejó que “no cometa el mismo error que el Frente para la Victoria y no se cometan los mismos atropellos que llevaron adelante los funcionarios del Afsca”.
Tras la aprobación del decreto que promueve la aprobación del ENACOM, se pasó al tratamiento sobre tablas de un proyecto de declaración impulsado por el massismo que recomienda al Poder Ejecutivo y también a la Comisión Redactora para la actualización y unificación de las leyes de Medios y de Argentina Digital una serie de medidas que establezcan una “competencia adecuada y efectiva en el mercado de la prestación de servicios de radiodifusión”.
Fue durante el debate de esta propuesta que surgió el reclamo del Frente para la Victoria para que el DNU que habilitaba la creación de la ENACOM fuese sometido a una votación nominal, pero el reclamo fue rechazado desde el oficialismo. Al momento de proceder a votarse el proyecto de declaración del massismo, el kirchnerismo abandonó el recinto porque desde ese espacio interpretaron que ya no podían votar en forma nominal la propuesta de creación del ENACOM.