El legislador provincial Fernando Valdez remarcó la necesidad de un cambio profundo en el manejo de las fuerzas del orden.
“Los años recientes de la Policía tucumana han estado salpicados de hechos repetitivos de corrupción, abusos y violencia. Y esto en medio de un escenario de ineficiencia y fracaso en la lucha por reducir los índices de inseguridad. Esta fue la razón principal por la cual los principales responsables de seguridad y policía fueron removidos de sus cargos. Por todo esto me preocupa enormemente que el flamante jefe policial José Díaz considere que su antecesor tuvo un desempeño impecable”, aseguró el legislador provincial Fernando Valdez.
El parlamentario, quien integra la comisión interpoderes que monitorea la aplicación de la Ley de Emergencia en Seguridad resaltó que “Si Díaz tiene este concepto de la gestión de Bustamante quiere decir que la tomará de referencia y hará más o menos lo mismo. No es un buen presagio, antes bien es una señal objetiva de que no se ve la necesidad de introducir cambios”.
“Nadie va a negar que es fundamental que la ciudadanía pueda confiar en las fuerzas de seguridad, pero una cosa es declamarlo como objetivo y otra es explicar cómo se lo va a lograr. Tampoco comparto la percepción de que en alguna época haya sido realidad una policía con fuerte inserción comunitaria. Creo que el nuevo jefe de policía tiene una imagen idealizada del pasado y una percepción muy equivocada del presente”, finalizó.