Mientras su presidente busca qué inventar para que el club dispute un torneo internacional en 2017, en Boca se planifica con un horizonte de ajuste. Si finalmente no hay competencia continental, algo que al club le representa una pérdida millonaria (1.350.000 dólares en premios por no participar y un ingreso de 35 millones de pesos de recaudación por jugar sólo los tres partidos como local de la primera fase) el extenso plantel de 30 profesionales deberá achicarse porque el presupuesto para el fútbol también será disminuido.
Por eso de acá a diciembre, con un fixture que incluirá clásicos frente a San Lorenzo, Racing y River en continuado, Barros Schelotto tendrá que agudizar su ojo para que al finalizar el año se incline por pulir su equipo y la búsqueda de refuerzos. “Sabemos que en algunas posiciones nos faltan refuerzos de jerarquía. La camiseta de Boca debe enchufar a los que están y aquellos jugadores que no se adaptan, a fin de año se tendrán que ir del club”, expuso Angelici. En eso coinciden con el entrenador, quien en las últimas horas le recordó al presidente que tendrían que haber hecho un esfuerzo por contratar a alguna de las prioridades que el DT le había solicitado luego de la eliminación de la Copa (Agustín Marchesín, Gustavo Gómez, Paolo Goltz, Guido Pizarro y Silvio Romero) y no dejarse llevar por un mercado en el que el club gastó 15 millones de dólares en el que apostó al futuro inmediato pero descuidó el presente.
Desde el club (¿por indicación de Mauricio Macri?) muchos ya bajaron un mensaje claro: achicar el plantel, vender poco, incorporar dos apellidos de renombre (¿un arquero y un nueve de área? y completar la nómina con juveniles. Sin otro objetivo que ganar el torneo local en junio de 2017 (hoy el equipo está a siete puntos del líder), no ven por qué se deba invertir de más. La evaluación será de Barros Schelotto, aunque todo estará sujeto a lo que decida Carlos Tevez a fin de año sobre su continuidad. “Si no sigue en Boca es porque se va a retirar”, se aventuró a decir Angelici. Ofertas no le faltan al Apache, pero todas las que llegan son de destinos exóticos (China, Emiratos Arabes, India y la MLS) y hoy no está en sus planes irse del país. Carlitos ayer no se entrenó pero igual forma parte de los concentrados que jugarán mañana a la noche contra Gimnasia. Si está bien, será titular en un equipo que repetirá a varios de los que cayeron el miércoles con Rosario Central.
Con una defensa que parece salir de memoria salvo por la disputa Fabra/Silva en el lateral izquierdo, ahí no aparece la lupa del DT. Tal vez pueda emigrar Juan Manuel Insaurralde (hoy relegado) si llega un ofrecimiento importante para que sumen minutos Lisandro Magallán o Gonzalo Goñi, un chico que se sumó a la Primera hace meses. En el medio sobran volantes, volverá Gago (tiene contrato hasta junio de 2017) y algunos quedan sin jugar, como Andrés Cubas. Carrizo (hoy vuelve a concentrarse con el grupo) es otro que estará bajo la lupa y la salida de Bentancur parece cerrada. Será un mes de pruebas y de evaluaciones. El Boca 2017 debe empezar a moldearse ahora.
Fuente: Clarín