Horas después de haber anunciado la extensión de la cuarentena por tres semanas en el Área Metropolitana, el presidente Alberto Fernández aseguró que aún no saben en el Gobierno si el coronavirus llegó a su pico en la Argentina o la propagación de casos puede ser aún mayor. “Eso va a depender mucho de nosotros”, puntualizó en una entrevista concedida a Canal 13.
“Desde hace dos semanas, cuando ocurrió lo de la Villa 31, tenemos 900 contagios diarios, donde la mitad ocurre en la Ciudad y la otra mitad en el Gran Buenos Aires. No sé si estamos en el pico porque ahora hay cierto amesetamiento y puede ser que crezca un poco más. Lo que sí es verdad es que desde el 21 de mayo hasta hoy pasamos de 200 contagios diarios a 900”, analizó el jefe de Estado en diálogo con el periodista Marcelo Bonelli.
El mandatario defendió la cuarentena. Dijo que si la Argentina no hubiera realizado el confinamiento obligatorio, no hubiera tenido el tiempo necesario para preparar hospitales y otros espacios que se utilizan para atender a los enfermos. “No es una enfermedad grata, no es una enfermedad fácil y no me gusta hablar de esto porque suena a autoelogios, pero gracias a la cuarentena que hicimos evitamos un sinfín de contagios y que el virus circule localmente en el 85% de la Argentina”, desarrolló.
“Hay que entender que la capacidad de contagio que tiene el virus es impresionante y tenemos que ser conscientes de eso. La cuarentena sirvió para que no ocurriera lo que pasó en otros países: que los médicos elegían quién vivía y quién no. Acá todos están en condiciones de ser atendidos y tenemos los respiradores necesarios para atender el peor pico de la pandemia. Hasta el día de hoy, la ocupación de camas es muy baja. En la Ciudad de Buenos Aires, el lugar de mayor concentración del problema, solo el 30% de las camas están ocupadas. Estoy seguro de que si seguimos en este ritmo, todos van a tener la atención que corresponde, absolutamente todos”, continuó.
Otras definiciones importantes de Alberto Fernández
Sin teatros ni recitales
“Vamos a tener que esperar un poco porque una infectóloga me decía que al virus le gusta la concentración de gente y el bullicio. Ahí es donde más problemas tenemos. Ahí tenemos que ser cuidadosos, muy responsables. Por eso, inclusive en los lugares donde desapareció el aislamiento y permitimos el tránsito de la gente, pedimos que se reúnan en espacios amplios y no más de 10 personas. El baby shower demuestra el riesgo. Para eso, todavía falta tiempo”.
Deportes olímpicos y fútbol
“Entiendo la preocupación de los atletas olímpicos; cuando los deportes son individuales y no exige equipos, parece ser más fácil. Los deportes en equipo presuponen fricción, cantidad de gente… Todos extrañamos el fútbol. Todos somos hinchas de algún equipo y extrañamos el fútbol, pero tenemos que ser muy cuidadosos”.
“Yo lo consulté a Gallardo para que me explique cómo es la situación del jugador, cómo se podría volver y además River fue el primero que tuvo una manifestación para no jugar y tuvo toda la razón del mundo. Creo que los tests rápidos pueden ayudar a volver rápido a los entrenamientos con todos los protocolos que hoy existen en Europa“.
“Gallardo me contaba que un equipo necesita dos meses de entrenamiento para volver a jugar al fútbol”.
Los anticuarentena
“No les respondo nada, no quiero entrar en esos debates. No soy yo solo. Los 24 gobernadores estamos preocupados para que nuestra gente no se enferme. Sabemos los padecimientos que esto trae. Que la cuarentena cierra colegios, cierra comercios y esto es algo que no nos hubiera gustado pasar. Cuando dicen que me enamoré de la cuarentena, me asombro. Es lo último que me hubiera gustado enfrentar en mi Presidencia. De ningún modo estoy enamorado de la cuarentena”.
“La pandemia ha traído un problema muy serio a toda la economía mundial y quienes no han hecho cuarentena han tenido resultados económicos iguales o peores a quienes la hicimos. Pensar que el problema es la cuarentena es un zoncera. En Suecia, yo conté que tenían los mismos resultados económicos que Noruega, que había sido mucho más estricto. Lo dije para demostrar que el problema no es la cuarentena, sino la pandemia. Después según pude leer, el médico me dio la razón y me dijo que su propuesta no había sido la mejor”.
Por qué tres semanas de cuarentena
“Intentamos un poco ir ordenando todo esto y no estar cada dos semanas revisando. Estamos seguro de que en dos semanas vamos a estar discutiendo las mismas cosas que ahora. Lo hacemos para organizarnos con más tiempo. La Argentina es algo más que Buenos Aires y el AMBA… Y con el 85% del país con la posibilidad de transitar, no hace caso revisar cada 15 días”.
El regreso de las clases
“Estamos viendo la apertura en escuelas rurales porque el riesgo es mínimo. Estamos viendo en algunas provincias que dicen que pueden hacerlo. Que los chicos vuelvan a clases es importante para todos: por la importancia de que aprendan y porque las familias se estructuran a partir de la actividad de los chicos en los colegios. Tenemos propuestas de varias provincias y lo estamos analizando. Si el protocolo es bueno, por supuesto lo vamos a hacer”.
La deuda externa
“Los acreedores corroboran día a día nuestra voluntad de llegar a una solución. Lo que sí queremos es que el acuerdo que hagamos, lo podamos resolver en el futuro. Yo quiero que esto no sea más un problema para los argentinos. No quiero que la deuda sea un condicionante para el desarrollo argentino. Lo hablé con los empresarios y se los expliqué. Lo que ocurre es que hay posiciones más tercas, más duras que hacen más difícil la negociación. Estamos trabajando con el ministro para ver de qué modo podemos acercarnos a la propuesta de ellos sin que esto signifique poner en riesgo el presente y el futuro argentino. La Argentina tiene hoy muchas más necesidades que cuando empezamos la discusión, antes del coronavirus. Pero tengo confianza en tanto y en cuanto los acreedores entiendan que no vamos a hipotecar el futuro de la Argentina”.