Alberto Fernández recibirá este jueves a un importante grupo de gobernadores peronistas y de partidos provinciales en un encuentro que se llevará a cabo en la Casa Rosada a partir de las 18. La reunión tendrá como eje tratar los proyectos que están vigentes para ampliar la Corte Suprema de Justicia.
El Presidente baraja la opción de que el máximo tribunal se amplié a 25 miembros y los gobernadores pidieron, el último 24 de mayo, en una carta conjunta, que se tomen en cuenta algunos de los tres proyectos presentados que proponen la amplitud de la Corte. Hay coincidencia de los jefes provinciales con la Casa Rosada.
Sea cual sea el proyecto que gane más consenso, Fernández pondrá en el centro de la agenda política el debate para ampliar la Corte Suprema, uno de los temas más sensibles que tendrá el segundo tramo de su gestión y que ya ha generado la reacción de los actuales integrantes del tribunal.
Ricardo Lorenzetti recordó que el peronismo impulsó en 2006 la ley que rige actualmente y establece una integración con cinco miembros. En ese sentido, aseguró: “Hubo una ley que fue votada por los mismos que hoy están discutiendo eso. Hay que tratar de tener cierta coherencia en favor de los ciudadanos”.
Fue durante una entrevista radial en la que también agregó: “Si un día decimos que la Corte tiene cinco integrantes, otro día 10 y mañana 15, no le damos ninguna seriedad a los ciudadanos. Y nosotros tenemos que tratar de dar seriedad, de dar serenidad; decir que esta es una regla que se mantiene en el tiempo”.
Los gobernadores, o sus vices, que estarán hoy en Balcarce 50 firmaron una carta que en su interior decía que “el objetivo es que la Corte Suprema de Justicia sea más moderna, más eficaz, acorde a las mejores experiencias internacionales y, principalmente, que tenga un verdadero carácter federal”.
En clave política, la misiva resultó ser una señal para la Corte Suprema en referencia al conflicto que existe entre el gobierno nacional y el de la Ciudad de Buenos Aires por la quita de un porcentaje de la coparticipación que el gobierno de Horacio Rodríguez Larreta pide que se le restablezca para sostener el pago de la Policía.
Después de varios encuentros de conciliación, las partes no se pudieron poner de acuerdo y será el máximo tribunal el que deba definir qué va a pasar con la coparticipación. Los mandatarios provinciales enviaron un mensaje político con esa carta. Le dijeron a la Corte que si inclina la balanza a favor de Rodríguez Larreta, apoyarán cualquier cambio profundo en la integración de la cúpula judicial.
Ese texto fue firmado por las provincias de Buenos Aires, La Rioja, Catamarca, San Luis, Formosa, Tucumán, Santiago del Estero, Santa Cruz, Entre Ríos, Tierra del Fuego, San Juan, La Pampa, Salta, Chaco, Misiones y Chubut. Todos sus gobernadores creen que la Nación, obligada por un fallo judicial, no puede beneficiar a CABA con más coparticipación en detrimento de las demás provincias.
En las últimas semanas el Presidente estuvo recibiendo a distintos gobernadores en la Quinta de Olivos. De a uno. En la mayoría de las veces compartió la cena con ellos. Además de algunos temas de gestión, Fernández los quiere tener cerca porque sabe que ya empezaron a moverse en el escenario político preocupados por la crisis interna que vive el Frente de Todos.
Entre los gobernadores hay cautela respecto a los pasos del Jefe de Estado, a quien respetan y aprecian, pero también existe un alto nivel de incertidumbre sobre lo que vaya a suceder con el proceso político del peronismo. Los mandatarios se están movimiendo impulsados por esa preocupación y analizando qué hacer si al final del camino el Presidente no se presenta a la reelección.
La mayoría de los mandatarios adelantará la elección por lo que la nacional quedará pegada a muy pocas provincias. El desdoblamiento expone la debilidad del Poder Ejecutivo. Los gobernadores no quieren quedar entrampados por la pelea entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner, y se abocarán a cerrar sus provincias y concentrarse en ganar las elecciones locales.
Hace tiempo que los gobernadores peronistas necesitan una jefatura política. En definitiva, es lo que esperan de Fernández desde hace tiempo y que aún, con menos esperanzas, algunos todavía aguardan. Ante la indefinición presidencial, empezaron a darle vida a la rosca política de alianzas y proyecciones electorales por su propia cuenta.
Los gobernadores no imaginan una coalición peronista con el kirchnerismo duro y La Cámpora timoneando el barco. Pero tampoco, al menos por ahora, visualizan con claridad la posibilidad de construir una alternativa afuera del Frente de Todos. Dependerá, en gran medida, de la supervivencia de la alianza que fundó Cristina Kirchner el día que eligió a Fernández como candidato a presidente.
Los mandatarios se están reuniendo con frecuencia en el Consejo Federal de Inversiones (CFI), uno de los reductos peronistas utilizado como punto de encuentro durante el gobierno de Mauricio Macri. En esa sede empezaron los debates sobre la ampliación de la Corte Suprema, pero también sobre el futuro de frente político que gobierna la Argentina. En esa mesa vuelcan todas sus dudas y enojos.
Del encuentro no formarán parte ninguno de los tres gobernadores de la UCR: Gerardo Morales (Jujuy), Gustavo Valdés (Corrientes) y Rodolfo Suárez (Mendoza). No fueron convocados y tampoco formaron parte de la iniciativa que tuvo como protagonista a 16 gobernadores.
Hay tres proyectos vigentes en el Congreso. Uno lo presentó el senador puntano Adolfo Rodríguez Saá y propone ampliar la cantidad de miembros de la Corte a nueve jueces, y federalizar al tribunal a través del nombramiento de magistrados por distintas regiones del país.
Otro fue presentado por la senadora de La Rioja Clara Vega. La iniciativa establece la paridad de género entre hombres y mujeres, pero no hace hincapié en la ampliación del número. Sostiene que los miembros de la Corte del mismo sexo no podrán superar en más de uno a los miembros del otro sexo.
Por último, está el que redactó el senador y ex gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, que pide ampliar la cantidad de jueces de los 5 actuales a 16 miembros. También reclama que se garantice la paridad de género y el federalismo.
Esta tarde Fernández le comentará a los gobernadores las bondades de una amplitud aún mayor, con 25 miembros, y levantará un debate que el oficialismo sabe que será muy difícil de transitar en el Congreso debido a la falta de mayoría en ambas cámaras.
fuente: infobae