El intendente capitalino, Germán Alfaro, ya comenzó su “operativo despegue de Cambiemos” con una velada crítica a la escasa participación del presidente Mauricio Macri en los acto por el 202° aniversario de la Independencia Argentina.
“Cuando el río suena, agua trae”, suelen decir en su sabiduría nuestros abuelos. En el caso del espacio Cambiemos en Tucumán, habría que tomar más seriamente las versiones que dan cuenta de un posible regreso de dirigentes justicialistas a su partido de origen, lo que le generaría varios inconvenientes en cuanto al armado electoral de cara al 2019. La versión se potencia por la caída en desgracia, o en jubilación anticipada y definitiva de la política comarcana de José Alperovich en el oficialismo, luego de ensayar una potencial candidatura a Gobernador, por dentro o por fuera de la estructura del PJ.
El ex hombre fuerte tucumano, que gobernó la provincia por 12 años consecutivos y que es el responsable del alejamiento de dirigentes como Germán Alfaro y Domingo Amaya, recibió la fuerte y contundente respuesta del actual mandatario, Juan Manzur, de repetir la fórmula con Osvaldo Jaldo en 2019. Alperovich quedó en una posición tan incómoda, que muchos vaticinan el final de su carrera política con su actual mandato de senador, que vence en el 2021.
Su debilidad deja abiertas a quienes tuvieron que irse, las puertas del Partido Justicialista, que en marzo tendrá una fecha electoral con la renovación de autoridades. El alejamiento de Beatriz Rojkés, esposa de Alperovich, es uno de los elementos que determinarán esos regresos, además de un cimbronazo fuerte en la estructura de Cambiemos y la oficialización de la conducción partidaria por parte de la fórmula gobernante conformada por Manzur y Jaldo.
Cuando las versiones no se confirman o desmienten por los propios protagonistas, hay que dejar que éstos lo hagan con sus propios actos. Tal es el caso del intendente capitalino, quien expresó en torno a la visita presidencial del 9 de julio pasado: “a mí me hubiese gustado que el Presidente venga con más tiempo. Ahora, si no vino a participar de todos los actos habría que preguntarle a él. ¿No repite la actitud de varios presidentes anteriores? Lo que más me duele es que se está haciendo lo que se criticaba. Creo que es lo que nos está haciendo daño institucionalmente, y como país”, sentenció el “lord mayor”, quien antes nunca había mostrado una desaveniencia con las autoridades nacionales y menos con el Presidente.
Las expresiones de Alfaro fueron tomadas con cautela por algunos referentes de Cambiemos, como José Cano, quien antes de polemizar prefirió justificar la agenda del presidente y compararla con los actos “cerrados” que hacía el “kirchnerismo”.
Lo cierto es que, pese a las disimuladas expresiones de uno y otro dirigente, es indisimulable que existen algunas fisuras dentro de la estructura de Cambiemos, que comienza a adolecer de liderazgos fuertes que los lleven a proyectarse en la adhesión de la gente.
Uno de los que no apareció en ninguna de las fotos oficiales y que forma parte de estas versiones de regreso al PJ es el ex intendente de San Miguel de Tucumán, Domingo Amaya. Muchos afirman que está más cerca que Alfaro de regresar en lo inmediato. Habrá que seguir, no sólo las expresiones de los protagonistas de estas versiones, sino su modo de conducirse en su relación con el oficialismo, y con los actuales aliados. Aunque esa alianza parece tener fecha de vencimiento y será antes del juego electoral de 2019.