Durante la mañana de este miércoles, la policía de la provincia de Salta allanó la casa del integrante del grupo folclórico Los Nocheros Mario Teruel en el marco de la causa por abuso sexual contra su hijo, Lautaro Teruel (26), quien está detenido con prisión preventiva e imputado por los delitos de exhibiciones obscenas agravadas y abuso sexual con acceso carnal.
El procedimiento fue autorizado por la titular del Juzgado de Garantías de 7° Nominación, María Edith Rodríguez, y encabezado por el doctor Sergio Federico Obeid, de la Fiscalía Penal de Delitos contra la Integridad Sexual N° 1 y a cargo de la investigación.
En la propiedad, que está ubicada en el barrio El Carmen, vive Mario Teruel y su familia, incluido hasta hace unos días el propio Lautaro. La defensa del detenido había pedido que su cliente cumpliera el arresto preventivo en dicho domicilio, pero la solicitud fue denegada, por lo cual hoy continúa alojado en la Alcaldía Judicial.
Fuentes de la investigación apuntaron a este medio que durante el operativo, el fiscal Obeid observó de manera casual plantas de marihuana, por lo que dio lugar a la intervención del fiscal Santiago López Soto, de la Unidad Fiscal contra la Narcocriminalidad (Ufinar).
Las plantas, que fueron secuestradas, estaban en una habitación acondicionada con varias macetas, un extractor de aire, lámparas, fertilizantes y ramas en proceso de secado. Al margen, incautó otros elementos que servirán para averiguaciones de la causa.
El caso se inició a partir de la denuncia de una mujer que aseguró que Lautaro abusó de su hija -que hoy tiene 17– en reiteradas ocasiones cuando la niña frecuentaba su casa para jugar con un familiar. En total, fueron cuatro episodios: dos hechos de exhibiciones obscenas agravadas y otros dos de abuso sexual con acceso carnal, según comunicó el Ministerio Público Fiscal de Salta. Por entonces, la adolescente tenía 10 años.
Pese a que los investigadores se manejaron con cierto secretismo, con el correr de los días fueron saliendo a la luz distintos audios de conversaciones que Lautaro mantuvo con la presunta víctima. En ellos, él admitía los hechos y le pedía disculpas a la menor.
Uno de los primeros fragmentos dura poco más de nueve minutos. “Con lo tuyo, digamos, hace mucho tiempo como tres, cuatro años, que vengo diciendo ‘tengo que pedirle perdón a esa pendeja’ porque se lo merece. Fue una pendejada. No puedo sacar cálculos sobre qué edad teníamos los dos. Por eso te quería pedir disculpas“, se le escucha decir a Lautaro en una suerte de monólogo culposo.
Luego, se difundió una nueva grabación secreta en la que el detenido afirma: “Ahora veo nenitas y no me pasa nada, (pero) si tengo dudas, le digo a mi viejo ‘ayudame'”. “¿Tus viejos saben?”, indaga en el audio la joven que fue víctima de sus abusos. “Sí -responde el acusado-, porque tu abuela me dijo: ‘Tenés que hablar con tu papá’. Y tiene razón, fue como dos días después de nuestra charla”.
En los audios también se desprendió otro posible caso de abuso. “Con la mina esta estuvimos dos de los tres. El único que no estuvo fue el que la pasó peor. Y la mina lo tiró, una amiga de toda la vida, pero podría haber levantado el tubo y decir: ‘Che, loco, me quiero juntar porque tengo una versión de lo que pasó esa vez, y capaz que ustedes tienen otra’. Gracias a Dios que no se viralizó fuerte. Más con mi apellido, podría haber salido sin asco, pero gracias al cielo y la tierra no fue así. De todas maneras, lo poco que se viralizó fue suficiente como para hacernos pingo a nosotros”, le contó Teruel a la joven que lo denunció.
La chica a la cual se refiere en la conversación lo había acusado a él y a sus dos amigos en Facebook. Sin embargo, en aquel momento no realizó la denuncia penal. La publicación era de diciembre de 2018, pero fue borrada, al igual que el perfil de la autora, que fue eliminado de la red social.
Una fuente cercana al expediente reveló que el operativo también estuvo impulsado por “una nueva denuncia por abuso sexual contra el acusado, que por el momento permanece en estricta reserva”.
Por lo pronto y mientras continúa la investigación, Teruel permanecerá alojado en la Alcaldía Judicial. El lunes 10 de junio será un día clave, ya que la adolescente va a declarar en cámara Gesell. A través de una gestión del abogado de la parte acusadora, Santiago Pedroza, la chica y la madre harán una ampliación de la denuncia que había sido rechazada en primera instancia por considerarse como una revictimización.