Con el lanzamiento de iOS 10.2 llegó la nueva app de Apple TV que se llama simplemente TV. Ésta permite trasladar las aplicaciones favoritas del usuario a la pantalla grande con algunos beneficios que vale la pena mencionar.
Por empezar se destaca la suscripción única. Ya no será necesario ingresar el nombre de usuario y la contraseña para cada app que se utilice.
Basta con tipear los datos de la suscripción al servicio de cable o TV satelital y de ese modo se accederá a todas las app en el paquete de TV pago que sean compatibles con esa app.
De este modo se logra unificar en un mismo sitio, un acceso directo e integrado para ver todo el menú de películas, series y programas de TV de diferentes aplicaciones.
El control remoto del nuevo Apple TV tiene un panel táctil en la parte superior que facilita la navegación por los distintos títulos, apenas deslizando el dedo
“Se pueden bajar apps como Direct TV NOW, PlayStation Vue o Sling TV desde la App Store y así navegar en la TV en vivo, disfrutar shows y ver películas on demand”, se destaca en la página oficial de Apple.
También es interesante que Siri permite hacer búsquedas por voz, por el nombre de la película, el actor, el género o incluso un estilo (películas con estética de los 80, por ejemplo). Eso sí: por ahora, Siri en Apple TV sólo comprende inglés.
Si uno no entendió algún diálogo en un momento del film, también se puede preguntar: “¿Qué dijo?” y el asistente de voz rebobinará automáticamente hasta 15 segundos atrás y volverá a reproducir el fragmento con subtitulado.
La variedad en la tienda de aplicaciones es otro punto a favor: no sólo hay espacio para las series y películas, también hay música y juegos. A su vez, es posible ver fotos y videos de la librería en iCloud.
Desafíos
Más allá de los nuevos beneficios, esta nueva propuesta de Apple tiene sus limitaciones. Deja en evidencia que todavía falta compatibilizar las intenciones de los medios digitales, la variedad de aplicaciones y el negocio de las compañías de cable.
La función que permite, por medio de una sola inscripción ver todo el menú de las distintas aplicaciones, es una gran ventaja, pero sólo funciona con algunos proveedores. Comcast, Time Warner Cable y Verizon FiOS están fuera de ese acuerdo.
Netflix y Amazon son otros de los dos grandes jugadores que Apple tiene que sumar. Tal como funciona ahora el sistema, es posible usar la función de búsqueda universal de la app de TV para navegar por Netflix, buscar distintas series e incluso ingresar a esa plataforma para verlas.
Pero no se puede sincronizar la cuenta de Netflix con la aplicación de TV, según publicó The Verge en un extenso artículo de análisis. No se integra al panel Watch Now o Ver ahora que se supone que es una de las características más destacadas.
Se supone que la nueva app de Apple busca facilitar la experiencia del usuario, unificando todos los servicios dentro un único sistema de búsqueda. Pero como carece de verdadero soporte de algunos de los grandes jugadores de la industria, tan sólo alcanza su objetivo de manera parcial.
En algún momento, el gigante de Cupertino consiguió tener una posición dominante en el negocio digital con iTunes y el entonces popular iPod. Logró el control sobre la forma en que el contenido era ofrecido y distribuido online.
Pero en el último tiempo las reglas del juego cambiaron. El iPod ya quedó en el pasado, y Apple no consiguió convertirse en un generador de contenido exclusivo. Ni siquiera cuenta con un servicio de streaming de video propio.
Apple necesita lograr que Netflix o Amazon compartan sus datos y también que canales como CBS y NBC produzcan un paquete de TV digital totalmente innovador que pueda competir con el cable.
Pero hoy la empresa de la manzana mordida ya no está en situación dominante. Ya no tiene el poder que ganó por medio del iPod y iTunes y que, hace 15 años, le permitió avanzar en la industria de la música, según se señala en el artículo de The Verge.
Apple intentó ganarse un sitio en el negocio de las licencias para ofrecer TV digital. Este proyecto implicaba conseguir licencias para hacer streaming fuera de los Estados Unidos y también contempla acuerdos con empresas afiliadas para proporcionar programación regional.
Las tratativas, que se llevaron a cabo entre 2009 y 2014, fracasaron, tal como quedó en evidencia en un reporte de The Wall Street Journal.
Apple todavía no resolvió la manera de convertirse en un verdadero líder disruptivo dentro del negocio de la TV digital. Apenas logró, ofrecer una suerte de guía de TV más refinada, donde el usuario logra una experiencia más integradora, aunque con sus limitaciones, claro.