En el partido más importante de los últimos cinco años, Argentina iguala sin goles con Perú en la Bombonera y complica seriamente sus opciones de clasificarse al Mundial de Rusia 2018 cuando queda apenas una sola fecha para el final de las Eliminatorias Sudamericanas en la que deberá enfrentar a Ecuador en la altura de Quito.
“No buscamos ahora un sistema de juego, sino relaciones entre los jugadores”,había dicho Jorge Sampaoli en la conferencia previa al partido y allí se resume lo que mostró el equipo nacional en el primer tiempo. No hubo sociedades fructíferas entre los que saben. No hubo sorpresas, no hubo imaginación ni cambios de ritmo.
Lionel Messi, el hombre sobre el cual se posan las esperanzas de la Argentina, estuvo celosamente controlado por entre tres y cinco jugadores de Perú con una metodología clara: uno sobre él al recibir la pelota y el resto escalonándose para no dejarlo avanzar.
Así, con el creador de juego bien contenido, fue difícil ver jugadas construidas de manera colectiva. Di María y Mercado se movieron por la derecha y el tándem fue improductivo.
Lo mejor del equipo nacional estuvo por la izquierda en el primer tiempo, con la sociedad entre Acuña y Alejandro Gómez. Hubo despliegue, pase, hubo un método, pero no acompañamiento y, así, los centros que llegaban al área apenas encontraban a Benedetto, muy solo.
Argentina tuvo dos muy claras, siempre con el nombre de Messi: primero con una jugada individual al estilo Barcelona. Tomó la pelota por la derecha, se cerró hacia el medio, se quitó a un marcador con una pisada de lujo y remató a centímetros del palo derecho del arquero de Perú.
La segunda fue sobre el final, con un centro que el propio delantero rosarino de izquierda a derecha que cabeceó Benedetto por arriba del travesaño, muy cerca.
Claro que la Selección de Sampaoli tuvo enfrente un rival que supo a qué jugar. No se vio intimidado por la Bombonera y hasta logró conexiones destacas que desairaron el ímpetu argentino, acaso más notable en las tribunas que en la cancha.
Perú no vino a la Argentina a ver qué pasaba. Le dio el control de la pelota a la Argentina pero lastimó cuando pudo e incluso a los 33 minutos tuvo una clarísima tras un defectuoso accionar de la defensa local entre Otamendi, Mascherano y Acuña, entre quienes se filtróuna pelota que Farfán no mandó a la red por apenas centímetros.
Hubo zozobra en la Bombonera. El partido continuó con la misma sintonía. Una Argentina desorientada y un Perú agazapado, para dar el golpe. Para el segundo tiempo Sampaoli tendrá que dar un golpe de efecto porque, por si fuera poco, Chile le gana a Ecuador y la Selección queda sexta, afuera del Mundial.