“Será histórico”, aseguraron en el entorno presidencial en medio de un fuerte hermetismo. Se esperan anuncios sorpresivos y anoche se especulaba con el tono de confrontación con los legisladores de cara a los meses más duros. Los bloques en alerta. La tensión reciente con el PRO.
“Histórico”. Así será, según el entorno presidencial, el discurso de más de media hora que Javier Milei prevé brindar esta noche -un horario atípico- en su primera inauguración de sesiones ordinarias del Parlamento, un mojón más de su estrategia de confrontación con el sistema político, en medio de un enrarecido humor social, con la oposición en estado de alerta y tras una semana de tensiones aún no saldadas con los bloques aliados.
“Los voy a sorprender”, les anticipó un Milei bien predispuesto a los diputados de la bancada libertaria en la mañana del miércoles, en la reunión de una hora y media que mantuvo con casi todos los legisladores liderados por Oscar Zago en la que se repasaron las encuestas que se consumen a diario por los estrategas del oficialismo, se analizó la marcha de la gestión y se intercambiaron opiniones sobre el año parlamentario, una charla que estuvo monopolizada por el jefe de Estado.
Anoche, en despachos oficiales, reinaba una creciente incertidumbre por el contenido del mensaje presidencial, y un premeditado hermetismo alrededor del anillo de confianza del mandatario, integrado por su hermana Karina y el asesor Santiago Caputo, el cerebro de la estrategia mediática, comunicacional y hasta política del gobierno. Son los dos colaboradores, además del jefe de La Libertad Avanza, que por estas horas tenían acceso al texto: en ese triángulo del poder se discuten y ejecutan los principales lineamientos de la administración central.
Caputo, cada vez más influyente, fue, por ejemplo, el ideólogo del cambio de horario del discurso inaugural del año parlamentario -el inicio de la asamblea está previsto para las 21, de noche-, una jugada que busca un mayor nivel de penetración social del habitual, y de la disposición del jefe de Estado que, a diferencia de sus antecesores, leerá el discurso parado desde un atril, al frente de la presidencia de la cámara, de cara a los legisladores y de espaldas a Victoria Villarruel y Martín Menem.
Según trascendió en las últimas horas, el presidente realizará esta noche un repaso de la herencia recibida: podría dedicar, en ese sentido, unos cuantos minutos a desmenuzar algunos de los resultados de la auditoría encargada a la SIGEN sobre el estado del Estado -el macrismo había ordenado una investigación similar durante el gobierno de Cambiemos-, y que todavía terminaban esta semana de corroborarse. Puertas adentro confiaron que, de confirmarse, algunas conclusiones podrían llegar a tener derivaciones de altísimo voltaje. El clima en las filas kirchneristas era este jueves de preocupación general. También en la bancada Hacemos Coalición Federal, presidida por Miguel Ángel Pichetto, que está intranquilo por el rumbo de la gestión.
En ese contexto, en el Congreso se acumulaban ayer una serie de interrogantes y una notoria expectativa por el contenido del monólogo presidencial y las posibles repercusiones en la relación entre el gobierno y el Congreso, al que Milei ya calificó como “nido de ratas” tras el fallido tratamiento de la Ley Ómnibus.
fuente: infobae