Rige un nuevo aumento en los cigarrillos, pero desde que comenzó la escasez -por el cierre de la fábrica debido a la cuarentena obligatoria-, muchos kiosqueros en Tucumán comenzaron a subir abusivamente los precios. Ahora, con este nuevo aumento, los valores de las distintas marcas están más distorsionados que antes.
Luego de la escasez de cigarrillos, producto del cierre de las fábricas cumpliendo el aislamiento social, preventivo y obligatorio en el marco de la pandemia por coronavirus, los cigarrillos aumentan sus precios un siete por ciento en promedio, desde ayer.
Llega así la tercera actualización de precios de este año. Fumar ahora cuesta -supuestamente- entre 10 y $ 5 más. Pero los kiosquero no cumplen esos valores y como carecen de controles al tratarse de un “vicio”, cobran lo que quieren.
De esta forma, el paquete de Marlboro Box 20 que valía $ 147 en marzo, debería venderse a $ 157 desde este mes. El Philip Morris KS por su parte, debería venderse a $ 130, pero su valor supera los $ 150 en los negocios “más buenitos”.
Chesterfield debería costar $ 130 en su versión box y $ 114 en versión KS; y L&M $ 110 en sus versiones Red KS y Blue KS.