Tras ganar el superclásico, Guillermo Barros Schelotto está loco de la vida y su única preocupación en Boca es la lesión que sufrió el arquero Guillermo Sara (luxación en el hombro derecho) que lo obligó a un debut oficial de urgencia a Axel Werner. El chico de 20 años asimiló su estreno entre buenas y malas (“No me sentí cómodo con los pies y en la última jugada del partido fallé en ir a buscar el centro”, admitió con una autocrítica siempre positiva para su crecimiento) pero en el club tienen en claro que en el mercado de pases que se inicia en breve el equipo deberá reforzarse con un arquero. “Para definir los refuerzos vamos a esperar a ver quienes se van, pero necesitamos un arquero para que le compita a Werner”, avisó Barros Schelotto. El presidente prefirió la mesura: “Con la lesión de Sara tendríamos un cupo más; vamos a ver qué posibilidades hay”.

Sara será operado el jueves y su recuperación demandará de dos a cuatro meses, por lo que se perderá la pretemporada y es probable que eso le imposibilite volver en plenitud.

Por eso el técnico quiere sumar un arquero. ¿Un titular o uno que pueda disputarse el lugar con Werner? El precio del mercado marcará las opciones. Pero como en agosto, cuando Agustín Marchesín era prioridad ante la salida de Agustín Orion, el listado de alternativas lo encabeza Sergio Romero, arquero de la Selección pero suplente en Manchester United, a quien Bauza ya le pidió que de cara a 2017 busque opciones para tener rodaje.

Desde el entorno de Chiquito deslizan que es difícil que retorne al país pero no descartan que pueda darse un arribo a préstamo para mantenerse en ritmo de cara al último tramo de las Eliminatorias. De ese tipo de jerarquía también surgen los apellidos de Franco Armani (multicampeón en Atlético Nacional de Medellín) y Nahuel Guzmán (juega en Tigres de México). Del ámbito local sólo Fernando Monetti (llegó a Lanús por pedido del Mellizo pero luego perdió el puesto) como un nombre seductor. Todos, claro, traen en su cuello cifras difíciles de pagar para Boca en una ventana de pases que lo tendrá en una faceta más vendedora que compradora, debido a que no jugará torneos internacionales en 2017. Por eso la cautela. El domingo jugará Werner (su pase pertenece al Atlético de Madrid y deberá irse en julio hacia Europa) y de ahora en adelante tendrá que demostrar que puede adueñarse del arco de Boca.

Fuente: Clarín

Comments

Comentarios